Las vacunas contra la covid-19 son hasta ahora la única esperanza tangible de superar la pandemia a nivel mundial. Sin embargo, esta no es una cura definitiva y si bien han reducido el nivel de contagios y de casos mortales, algunos países han sufrido nuevos picos debido al relajamiento de las medidas.
Este es el caso de Chile, que tuvo un incremento de casos nuevos de un 25 % en tan solo dos semanas y la ocupación de las unidades de cuidado intensivo (UCI) aumentó a más del 95 % en los últimos días, producto de que hay por lo menos 3.200 pacientes que están sufriendo síntomas graves del SARS-CoV-2.
Pese a ser uno de los países con la vacunación más avanzada en la región y de convertirse en ejemplo mundial de cómo suministrar un alto número de dosis en poco tiempo, la ciudad capital, Santiago, tuvo que regresar a cuarentena, razón por la que hasta la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que el país era un ejemplo de que las vacunas no son la única solución a la pandemia.
La jefe técnica del organismo, María Van Kerkhove, manifestó que “todos los países deben tener en cuenta que las vacunas son una herramienta muy poderosa, pero que también se necesita aplicar otras medidas que pueden prevenir infecciones”.
Es por esta razón que algunas autoridades del país austral están evaluando la posibilidad de proyectar la aplicación de una tercera dosis de las vacunas contra la covid-19, con el fin de aumentar la inmunidad de las personas y garantizar que no regresen las fuertes olas de contagio. El anuncio estaría muy en línea del hecho por la farmacéutica Pfizer que hace algunas semanas señaló que su biológico podría necesitar una tercera dosis de refuerzo.
El Ministerio de Salud de Chile está “haciendo un seguimiento y evaluando la posibilidad de necesitar una tercera dosis”, dijo la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, a Radio Universo. Al tiempo que señaló que el estudio que está realizando la Universidad Católica sobre el comportamiento del virus en las personas vacunadas será definitivo en esta decisión.
El investigador y doctor Alexis Kalergis, encargado de este estudio, dijo al diario El Mercurio que se está a la espera de que concluya “el seguimiento de las personas que tuvieron las dos dosis a 28 días, y seis meses después (de inoculados), y en la medida que veamos esos resultados, vamos a ver la necesidad de colocar una tercera dosis, que probablemente va a ocurrir”.
Otra de las razones para aplicar una dosis adicional y que no tiene que ver con la tercera ola de contagios que se está presentando en el país, es que las vacunas aunque son confiables tuvieron poco tiempo de ensayos y resultados a largo plazo, razón por la que el mundo apenas a finales del 2021 comenzaría a evidenciar si hay realmente una efectividad de todos los biológicos en la lucha para detener los contagios.
Chile tiene 41.091 contagios activos y reportó en las últimas 24 horas poco más de 6.700 nuevos contagios.
Ante el creciente número de casos en diferentes países de las Américas, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) llamó a endurecer las medidas para contener la propagación del virus en lugares de alta transmisión.
Regiones de México y Brasil, así como Cuba, República Dominicana, Guatemala, Panamá, Colombia, Bolivia, Chile y Uruguay han reportado un alza de contagios recientemente, dijo la directora de la OPS, Carissa Etienne, en rueda de prensa.
“En este contexto, instamos a los países a endurecer las medidas de salud pública en lugares con alta transmisión. Esta es la forma más eficaz de reducir los casos hasta que tengamos suficientes vacunas para todos”, dijo.
La OPS recomienda enfáticamente usar máscaras, mantener distanciamiento físico entre las personas, y evitar aglomeraciones en espacios interiores como formas de contener la expansión del virus.
*Con información de la AFP.