Tras un apagón de varias horas en la página del Ministerio de Salud de Brasil, la información consolidada sobre la pandemia del coronavirus desapareció del lugar en el que se encontraba. Si antes la web mostraba el consolidado histórico de infectados y fallecidos por la covid-19 en ese país, y un mapa con la distribución regional del virus, ahora solo sale la información de las últimas 24 horas que se va borrando cada dia. Algunos creen que esta es una maniobra del presidente Jair Bolsonaro para ocultar información sobre la pandemia y, de hecho, varios gobernadores, un juez supremop y un exministro de salud han salido a criticar la decisión del gobierno, ya que consideran que dificultará la labor de los científicos y epidemiólogos que deben hacer seguimiento a la evolución del coronavirus en Brasil.
Hasta ahora, la labor de Bolsonaro frente a la crisis ha sido bastante criticada. Desde el inicio, el mandatario le restó importancia al brote diciendo que se trataba de una simple gripa y por sus decisiones, su país es hoy uno de los epicentros de la pandemia a nivel mundial con 35.930 muertes y 672.846 infectados. Mientras los gobernadores han reaccionado con cuarentenas y medidas de aislamiento, el presidente las ha criticado y quiere que su país siga adelante sin detener la economía. Ante las quejas de los periodistas y las preguntas por el número de muertos, el presidente ha respondido con frases que muchos consideran insultantes, como: "lamento la cantidad de muertos, pero ese es el destino de todo el mundo". Hace poco, después de destituir al anterior ministro de salud, Bolsonaro nombró en esa cartera a un general del ejército. Ante las críticas por la desaparición de la información, Bolsonaro defendió la decisión en Twitter: “Al acumular datos, además de no indicar que la mayoría (de los infectados) ya no tiene la enfermedad, no se está retratando el momento del país. Se están poniendo en marcha otras acciones para mejorar el registro de casos y confirmar el diagnóstico", escribió.
Esta, sin embargo, no es la primera decisión autoritaria y poco transparente del presidente frente a la pandemia. Desde que salió el anterior ministro de salud, las conferencias de prensa para informar del avance del virus en ese país comenzaron a ralentizarse, la difusión oficial de datos se retraso y las salidas del presidente y el ministro se retrasaron para las 10 de la noche, después de que la mayoría de los periódicos ya han salido a impresión. Algunos creen que todas esas decisiones implican un intento por ocultar la información oficial de la pandemia y acallar las críticas ante su gestión.