China informó este lunes de cinco nuevos casos de coronavirus en Wuhan, el foco de la pandemia de covid-19, un día después de anunciar la primera infección en más de un mes en esta ciudad del centro del país. La metrópolis de unos 11 millones de habitantes, puesta en cuarentena durante más de dos meses a finales de enero, se vio muy afectada por el virus, que infectó a casi 83.000 personas y causó 4.633 muertes en el país, según las cifras oficiales. China informó el lunes de un total de 17 nuevos casos de covid-19, 10 de los cuales son infecciones de origen local. Es el segundo día de aumento de dos dígitos en el número de contagios en un día.
Desde el 1 de mayo, se habían mantenido a menos de tres por día. De estos nuevos casos locales, cinco se han registrado en el noreste del país, cerca de Rusia y de Corea del Norte, lo que hace temer la aparición de nuevos focos de contagio. La ciudad de Shulan, con unos 670.000 habitantes, fue puesta en cuarentena después de la detección de al menos 11 casos durante el fin de semana, según la televisión pública CCTV. Hasta ahora China había frenado la epidemia, según las cifras oficiales. No se ha informado de muertes relacionadas con el nuevo coronavirus en el país desde hace casi un mes y la actividad económica se reanuda gradualmente.
El parque Disney de Shanghái vuelve a abrir pero con restricciones El parque Disney de Shanghái volvió a abrir sus puertas al público este lunes pero con restricciones, un signo de la vuelta progresiva a la normalidad en China pese a la amenaza persistente del coronavirus. El parque de atracciones, situado en la mayor ciudad de China, es el primero en el mundo que vuelve a abrir sus puertas desde que empezó la pandemia, con importantes consecuencias económicas para el grupo estadounidenses de entretenimiento. A medida que la propagación del coronavirus se ralentiza en China en las últimas semanas, el país empezó a abrir algunas atracciones turísticas, como la Gran Muralla o la Ciudad Prohibida en Pekín. En Shanghai Disneyland Park, los visitantes debían este lunes llevar mascarilla y mostrar el color verde en una aplicación de su teléfono para demostrar que no están contaminados y poder enterar.
La reanudación de la actividad será progresiva. El parque tiene previsto acoger un máximo de 24.000 personas al día durante varias semanas en vez de las 80.000 que suele acoger normalmente. Además es obligatorio reservar antes por internet. Dentro del parque los anuncios por megafonía recuerden a los clientes que hay que mantener la distancia en la cola de las atracciones. En el suelo, las líneas amarillas marcan la distancia mínima que hay que respetar entre las personas. El parque prometió aumentar la frecuencia de la desinfección y limitar, o incluso anular, las interacciones entre el público y los personajes como Mickey y Donald. A pesar de los temores, las entradas para esta primera jornada de apertura se acabaron en pocos minutos el viernes, cuando se pusieron en venta por internet, indicó la prensa local. "Incluso si muchas atracciones siguen cerradas, estamos muy impacientes" dijo a la AFP una visitante en la entrada del parque, acompañada por una niña de 5 años. "Hemos pasado dos meses encerradas, era un aburrimiento mortal", añade. Con información de AFP