Luis Gerardo Ramos, un practicante del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), denunció que una mujer lo atacó verbalmente y le arrojó cloro cuando él se encontraba realizando compras en un centro comercial en la ciudad de Reynosa, al noreste del país. "Después no vaya a ser ácido", comentó. Ligia Kantun, enfermera e instrumentadora médica en el estado de Yucatán, rechazó la agresión que recibió por parte de un desconocido cuando salía de un establecimiento de comidas. El hombre le lanzó por la espalda café hirviendo, mientras le gritaba que los "iba a contagiar a todos". Su hija le dijo al agresor en Facebook que "ojalá no le pase algo peor".  Karen, una joven médica de un hospital público de Ciudad de México, reveló en una entrevista a la agencia AFP que solo por el hecho de portar su uniforme es víctima del desprecio y rechazo por parte de las personas que encuentra en las calles, en el transporte y en las tiendas.

Estos y otros testimonios del personal médico y los trabajadores de la salud en México, que han sido agredidos verbal y hasta físicamente, han prendido las alarmas en ese país. A diferencia de otros lugares, no han recibido el apoyo, mensajes de ánimo y la solidaridad de las personas, sino que han sido fuertemente señalados por supuestamente estar contagiados por el coronavirus y ser un riesgo para los demás.

México ya cuenta con 4.661 casos reportados de la covid-19, según reportes oficiales, y se han registrado 296 muertos. Esto, por supuesto, ha alimentado el temor de los mexicanos, que en su mayoría habían continuado con normalidad sus actividades cotidianas, pues el presidente Andrés Manuel López Obrador no se había animado a decretar la cuarentena nacional por temor a una crisis económica y social.

Ante esta problemática social, el IMSS condenó las agresiones y la violencia en contra de los trabajadores de la salud. "No tienen ningún sentido, ninguna razón y son absolutamente indignantes. No permitamos que el miedo nos ciegue", aseguró el director del instituto, Zoé Robledo. Igualmente, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) informó en un comunicado que las denuncias por los actos de discriminación se incrementaron entre el 6 y el 9 de abril. Según Conapred, las más usuales fueron la prohibición del uso de transporte público al personal de la salud, así como agresiones físicas y verbales.