“Si nos enfrentáramos a la misma enfermedad sabiendo lo que sabemos hoy, creo que acabaríamos haciendo algo a medio camino entre lo que Suecia hizo y lo que hizo el resto del mundo”, fueron las palabras con las que Anders Tegnell, principal epidemiólogo de la Agencia de Salud Pública de Suecia, admitió que se debieron haber tomado otras medidas desde el inicio de la pandemia de coronavirus en ese país.Suecia es uno de los países en los que no se implementaron tantas medidas estrictas de asilamiento para evitar la propagación del coronavirus, ante lo que Tegnell aceptó que eso terminó causando miles de muertes. De acuerdo con cifras de la Universidad Johns Hopkins, en el país hay confirmados 40.803 casos de covid-19 y 4.542 personas fallecieron por la enfermedad.

En ese país, en medio de la emergencia sanitaria las personas han podido salir libremente a las calles, restaurantes, centros comerciales, peluquerías, y se apeló a la responsabilidad individual para proteger a los grupos de riesgo. Por el contrario, únicamente se prohibieron los eventos con más de 50 asistentes y las visitas a las residencias de mayores, y se cerraron institutos y universidades.

Esta estrategia fue apoyada en principio por el epidemiólogo Anders Tegnell, que ahora se muestra inseguro sobre qué fue lo que debió haber hecho el Gobierno para evitar el desalentador panorama en Suecia, que registra una alta mortalidad por encima del resto de vecinos nórdicos.De hecho, la ministra de Finanzas, Magdalena Andersson, señaló en días pasados que Suecia se enfrenta a su peor crisis económica desde la Segunda Guerra Mundial, con un PIB que se desplomará un 7 por ciento en 2020, lo que daría a entender en parte que el haber mantenido el funcionamiento del país en medio de la crisis no blindó a la economía de los efectos del coronavirus.

Cabe mencionar que el experto aclaró en una conferencia de prensa que la estrategia no fue del todo mala. "Todavía creemos que la estrategia es buena, pero siempre se pueden hacer mejoras, especialmente cuando se mira hacia atrás (...) Siempre se pueden hacer las cosas mejor", declaró el epidemiólogo.Aunque en el mes de abril el Parlamento sueco aprobó una ley temporal de urgencia para permitir el cierre de puertos, aeropuertos, estaciones de tren, centros comerciales y restaurantes, la normativa todavía no ha sido puesta en práctica.