Si bien Italia y España son los países que más sufren actualmente por culpa del coronavirus con reportes de muertos e infectados que se multiplican cada día, un nuevo país podría estar a punto de llegar a la misma situación: Estados Unidos. Según las cifras de muertes e infecciones que se actualizan a diario, ese país ya es el tercero con más casos de coronavirus por encima de España y por debajo de China e Italia. A la fecha, tiene a 42.032 infectados y a 508 muertos.
Y aunque los fallecidos aún no son tantos como en Europa o en China, a los expertos les preocupa que la cifra de contagiados se ha duplicado desde el viernes en la tarde y que el gobierno ha tardado en reaccionar con una estrategia nacional contra la pandemia. Hasta ahora, varios estados como California o Nueva York, han decidido actuar por su cuenta y han declarado cuarentenas o el cierre de escuelas y colegios, pero en otros la vida sigue normalmente. El presidente Donald Trump decidió solo aplicar unas medidas de aislamiento el pasado 16 de marzo que tienen vigencia por 15 días. Allí prohibió las reuniones de más de 10 personas, recomienda el teletrabajo y pide que los ciudadanos no salgan a la calle para cosas innecesarias. Aún así en el país se han seguido presentando aglomeraciones. Este fin de semana se viralizaron varias fotos de ciudadanos paseando por las playas de Florida o de multitudes viendo el florecimiento de los cerezos en los parques de Washington. Y ante el pedido de endurecer las medidas y declarar una cuarentena, Trump tuiteó: “No podemos permitir que el remedio sea peor que el problema en sí mismo. ¡Al final del periodo de 15 días, tomaremos una decisión sobre el camino que queremos seguir!”.
Muchos temen que el virus comience a expandirse en los lugares que no están tomando las medidas adecuadas. Ya tienen un ejemplo terrible: Nueva York, la ciudad que no duerme y que hoy permanece totalmente solitaria debido a que se ha convertido en uno de los focos mundiales del covid-19. El pasado domingo, de hecho, se anunciaron 4.800 casos nuevos solo en la ciudad. “Esta semana se va a poner muy mal. Necesitamos unirnos como nación. De verdad, de verdad, necesitamos que todo el mundo se quede en casa”, dijo desesperado Jerome Adams, director general de Salud Pública. Para empeorar las cosas, el congreso sigue enfrascado en una lucha ideológica que no deja avanzar las medidas propuestas por el gobierno. Un paquete de medidas sin precedentes para ayudar a la economía, por ejemplo, no ha podido ser aprobado, pues los demócratas creen que solo benefician a las empresas y no a los trabajadores, los hospitales o las administraciones locales. Los científicos, además, critican la demora del gobierno en aplicar pruebas masivas de covid-19 a toda la población, un error que hasta ahora se está solucionando. Así como la falta de tapabocas, mascarillas y respiradores para atender la crisis.
En el entretanto, varias empresas han cerrados sus puertas, miles de personas han sido despedidas y ahora están desempleadas y las bolsas de valores vienen cayendo desde hace tres semanas sin descanso. Un duro golpe para Trump, quien se vanagloriaba del buen estado de salud de la economía de su país, a unos meses de las elecciones generales. Algunos creen que lo peor está por venir y que si no se toman medidas urgentes, en una semana Estados Unidos estará viviendo la crisis que hoy pasan España e Italia.