La nueva cotidianidad ya se vive en las calles italianas. Desde el 4 de mayo, el primer país europeo en imponer cuarentena entró en la llamada ‘fase 2’. A partir de esa fecha los ciudadanos pudieron salir por primera vez a dar un paseo a pie o incluso a visitar a sus familiares en la misma ciudad. Pero desde este martes, reabrieron comercios no esenciales como tiendas de ropa, además de restaurantes y bares, sitios predilectos por los italianos.
El 10 de marzo el primer ministro Giuseppe Conte decretó confinamiento obligatorio en todo el país. Fue un poco tarde, sin embargo, porque la enfermedad se propagó de manera desenfrenada en este país en cuestión de días. Pocos creyeron que el brote de coronavirus de Wuhan se convertiría en una pandemia con consecuencias devastadoras y cuando se reportó el primer contagio las personas siguieron haciendo su vida normal.
Las iglesias, que deben desinfectar todo varias veces al díam, también reabrieron desde este 18 de mayo. Foto: AP No obstante, las cifras de contagios y decesos empezaron a disminuir. La cuarentena dio resultados y lo que en un momento parecía una pesadilla sin fin, empezó a mejorar. Este lunes, después de casi tres meses, Italia reportó 99 muertos en un solo día y 452 contagios nuevos: el menor registro desde marzo.
Conte afirmó que Italia estaba dando un gran paso en esta fase 2, pero que los próximos meses iban a ser muy duros, “algo que no podemos ignorar”. Por otro lado, Francesco Boccia, ministro de Asuntos Regionales, advirtió que se inicia una de las semanas más difíciles. “Estoy muy preocupado, como cualquier otra persona. Esta semana y la próxima serán cruciales para saber si lograremos -y cómo lo haremos- convivir con la covid-19”. Además, advirtió que si en alguna región se da un repunte importante de contagios y los gobernadores no deciden cerrar, podrá intervenir el Gobierno central para hacerlo.
Las calles en Milán, una de las ciudades más afectadas, se volvieron a llenar. Esta foto en la zona social de Naviglio, refleja la reactivación de varios establecimientos.. Foto: AP Con este panorama, el lunes después de poco más de dos meses, Italia reactivó gran parte del país. Cafés, bares, restaurantes, tiendas no esenciales, además de peluquerías y barberías, retomaron nuevamente sus actividades. En las dos últimas deben atender únicamente con cita previa y no es permitido esperar para un turno dentro del local. Las mascarillas, al igual que en gran parte del mundo, son de uso obligatorio y en las tiendas de ropa, por ejemplo, los clientes reciben a la entrada antibacterial y guantes para manipular las prendas. Además, deben hacer fila para entrar como lo han hecho en estos meses en los supermercados, pues el aforo de los establecimientos es limitado.
En los restaurantes, bares y cafés los comensales deben mantener un metro de distancia entre cada persona y cada mesa. Pero si va una familia que vive en una misma casa entonces se pueden sentar juntos sin necesidad de mantener la distancia o de usar plexiglás. Este plástico, cada vez más usual en tiempos de ‘posconfinamiento’ lo ponen en la mitad de las mesas para que no haya contacto entre las personas en caso de que no vivan juntos. No obstante, esta medida no es obligatoria, los clientes aún pueden elegir si usarlo o no.
Los restaurantes, cafés y bares deben garantizar la distancia mínima recomendada entre cada mesa. Foto: AP El aperitivo, una práctica social muy popular en Italia y España, por el momento sigue suspendida. Aquella tradición de sentarse en una mesa y compartir un mismo plato con otra u otras personas, un vino, algunas rodajas de embutidos italianos como prosciutto, salami, pancetta, entre otros, no están permitidos. Cada persona debe comer de su propio plato. El deporte también se reinició este lunes, pero como todo, con varias restricciones. Las personas pueden jugar tenis pero no en parejas y por el momento no hay ningún anuncio sobre juegos de fútbol. De hecho, aún están suspendidos todos los deportes en equipo.
Por su parte, piscinas y gimnasios abrirán el 25 de mayo con estrictas restricciones y reglas para poder funcionar. Que haya espacio suficiente entre cada persona es uno de los principales requisitos.
Barberías y peluquerías reabrieron al público. Sólo pueden atender con cita previa y deben mantener la distancia de un metro entre cada cliente. Foto: AP En cuanto a los viajes, una de las decisiones más esperadas, recomenzarán desde el 3 de junio. Tanto al interior de Italia, como desde el exterior. Aquellos turistas que lleguen a este país desde países miembros de la Unión Europea, los que están dentro del Acuerdo Schengen, Reino Unido, Mónaco y el Vaticano, no tendrán restricciones ni cuarentena obligatoria al ingresar. Los lugares como cines y teatros abrirán a partir del 15 de junio y tendrán un aforo muy limitado, además de tener las sillas marcadas para mantener la distancia recomendada entre cada espectador. Así mismo, los campos de verano para niños comenzarán a funcionar desde esta fecha.