En redes sociales circula un video de un mandatario que pocos conocían antes. El hombre de barba y aspecto aún joven es Nayib Bukele, presidente de El Salvador, y en el video anuncia las medidas que va a adoptar el país para superar la crisis por el coronavirus.Bukele ordenó el pasado sábado una "cuarentena domiciliar" y "absoluta" por 30 días para contener la pandemia de covid-19 y anunció la entrega de un subsidio por 300 dólares aproximadamente a 75 por ciento de los hogares salvadoreños.El presidente salvadoreño decidió adoptar esta medida cuando solo llevaban tres casos de infectados, entendiendo que entre más temprano se haga el aislamiento menos van a ser las víctimas de la enfermedad.
El mandatario de 38 años elaboró un plan de 30 directrices económicas en las que le dio prioridad a las personas más necesitadas, pero lo que más ha llamado la atención es su posición férrea ante los ricos.
El gobierno de Bukele suspendió durante tres meses el recibo de la luz, del agua, la cuota de teléfono, cable e internet. También el pago de hipotecas y de alquileres, tanto para la vivienda como para locales comerciales sin intereses; hizo lo mismo con préstamos correspondientes a carros o motos.La continuación del pago se hará diluyendo los pagos de esos tres meses a lo largo de lo que resta del crédito. "Si usted tiene una hipoteca de 30 años y ya pagó 13, los tres meses serán repartidos en los 17 años siguientes sin intereses", explicó.Para asegurar que los recursos se usen de forma óptima, Bukele amenazó con encarcelar a los posibles corruptos. "Al que toque un centavo yo mismo lo voy a meter preso", advirtió el mandatario, quien tendrá un equipo de 60 auditores revisando el uso del dinero durante la emergencia.Otra de las órdenes de Bukele fue congelar los precios de los alimentos y productos básicos para evitar la especulación y asegurar que todos los ciudadanos puedan abastecerse durante la emergencia.
"No suban los precios porque vamos a cerrar sus negocios y les vamos a decomisar la mercadería con la que querían estafar a la gente", afirma.Otro de los puntos de su discurso que llamó la atención fue el mensaje a los empresarios, a los que les pidió aceptar perder parte de sus riquezas acumuladas para asegurar que el Estado preste los servicios de salud óptimos en tiempos de crisis."Ustedes tienen dinero para 10 o 20 vidas. No tienen tiempo para gastárselo todo. Piense en vivir. Piense en que cuando usted necesite una cama de hospital para que le atendamos créame que lo último que le va a importar es su cuenta de banco", dijo el presidente."Esto es una situación nunca antes vista por los que estamos vivos. Las potencias del mundo no saben qué hacer. Piensen en su familia. Nadie está inmune. Ya vimos que los jóvenes también mueren. Quiero pedirles que se lo tomen en serio. Sé que algunos van a perder algo de lo que tienen o de lo que les falta, pero piensen en cuánto vale la vida. Cuánto darían por traer a un ser querido de regreso. Yo daría todo lo que tengo. Sacrifiquémonos todos un poquito", concluyó el aclamado presidente.
Bukele ya había sido viral después de un discurso en la ONU en el que propuso a su país como un ejemplo de cambio en el mundo.“Qué papel debería venir a jugar? ¿Venirles a pintar el cuento, como hacían los otros presidentes, de pintar un Salvador que no existía? ‘Hemos combatido la pobreza y la desigualdad y hemos crecido tanto y la gente está bien y la salud y la educación está excelente’. Yo recuerdo que a todos nos daba cólera ver a los presidentes venir a mentir”, dijo Bukele. “Yo dije por qué no mejor ponemos a El Salvador como una voz de cambio en el mundo”.