Mientras viajaba con su familia por carretera, un hombre experimentó una situación alarmante: su hijo convulsionó. Rápidamente, en medio de la angustia, detuvo el vehículo y marcó el número del único pediatra que tenía en el radar, el doctor Daniel Jaramillo. Luego de un par de timbres, el médico le contestó y le hizo las preguntas necesarias para dar un diagnóstico. “Le dije que se tranquilizara, que se trataba de una convulsión febril ocasionada por el aumento de la temperatura en el cuerpo, y que todo iba a pasar. Eso sí, les advertí que si persistían los episodios, debían ir a un centro médico”, dice el doctor. Ese fue el momento en el que Jaramillo decidió abrir un Instagram para resolver las dudas de los padres de familia. “Comencé a pensar en millones de personas más en Colombia que no tenían acceso a un pediatra y me encontré con la facilidad de ayudarlos, y por eso decidí abrir el Instagram”, dice. "Me han escrito en Colombia desde las ciudades grandes, pero también de Huila, Vichada y Rioacha. Y me escriben mamás que están en México, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, pero igualmente de Italia, Francia y hasta de Líbano", agrega.
De ojos verdes y cabello rubio, Daniel Jaramillo parece extranjero. Sin embargo, nació en Cali. Estudió medicina y, luego de obtener su título, decidió irse a Estados Unidos. Allí homologó su carrera y se graduó como pediatra en el Jackson Memorial Hospital con la University of Miami. Luego hizo una subespecialización en medicina deportiva pediátrica con el Akron Children’s Hospital, para atender a los niños y jóvenes en colegios y universidades. Actualmente se encuentra trabajando en una clínica en California y se dedica al cuidado primario de pediatría. En medio de la pandemia, las consultas han aumentado, no solo en la clínica, sino en sus redes sociales. “Esto ha sido un reto para todos los médicos. Así como a los gobernantes de todos los países los tomó por sorpresa esta situación, a nosotros también porque se trata de una realidad diferente. No sabíamos nada del virus y poco a poco hemos ido conociendo más”, explica.
En la clínica donde trabaja, la manera de hacer las cosas ha cambiado, como en la mayoría de los centros médicos del mundo. Por eso, ahora algunas consultas se realizan por llamada y videollamada. Asimismo, los menores que deben acudir al centro médico, si no llegan con tapabocas, a la entrada reciben uno. “En los parqueaderos también estamos habilitando el espacio para atender a los que tienen sospechas del virus”, cuenta. De hecho, en la clínica se dio un caso de coronavirus. “Esa persona estuvo en contacto con otras personas. Se habló con los demás y se les hicieron pruebas. Las de ellos salieron negativas. Es importante que si alguien da positivo, esta persona cumpla con el aislamiento”, dice. Para Jaramillo, la educación es importante en la batalla contra el coronavirus. “Así el paciente venga a la clínica por un dolor de oído, que no es un síntoma de coronavirus, nos sentamos con él cinco minutos para explicarle la importancia de quedarse en casa. Tomamos la decisión de hacer eso con todos”.
Como parte del proceso de enseñar los cuidados a los más pequeños, el doctor Jaramillo también les habla de lo relevante que resulta un buen lavado de manos. “Les digo a los padres de familia que hay que estar atentos a síntomas como la fiebre, la tos y la dificultad para respirar”, cuenta. "Mi idea era, así tuviera un solo seguidor, poder ayudarle a esa persona” Estas enseñanzas han pasado a su Instagram, porque entiende la preocupación que genera el virus en el mundo. “A nosotros como médicos también nos preocupa la situación. Y para colmo nos hemos llevado la sorpresa de que los síntomas han variado en los pacientes. Al principio se hablaba solo de fiebre, tos y dificultad respiratoria. Pero en las últimas semanas se han visto casos en los que los pacientes presentan pérdida de olfato, del sabor de los alimentos. También hemos visto pacientes que empiezan con diarrea. Otros dan positivos sin tener síntomas. Esta variación complica el proceder de todos los médicos”, cuenta. En sus tiempos libres, Jaramillo atiende las preguntas que llegan a sus redes. “Yo me levanto todas las mañanas y mientras me tomo mi cafecito, respondo de cinco a diez preguntas que me dejan las mamás el día anterior”, cuenta. “Ahora con el coronavirus me consultan más. Yo no receto medicamentos, ni nada. Yo les doy consejos”, agrega.
Además de responder a las dudas, el médico postea recomendaciones en el día a día. En una de sus publicaciones, por ejemplo, explicó cómo hablarles a los niños sobre el coronavirus, ya que según explica, puede generarles ansiedad y miedo. Actualmente tiene en su Instagram 17.100 seguidores. En su cuenta, además de hacerle preguntas, las madres aprovechan para comentar sobre su labor. "Excelente. Gracias por tanta información de valor. Siempre estoy pendiente de tu contenido", le escribió una de ellas. "Mil gracias, doc. Es muy importante seguir estos consejos para estar en calma", le comentó otra.
“La única forma de sacar esto adelante es que entre todos nos protejamos” Él sabe que el país en el que reside es el foco de la pandemia en el continente. Por eso insiste en que, si pueden, las personas deberían mantenerse en sus hogares. “Se abrieron playas aquí, en California, y todo el mundo salió. Esa persona que estaba contagiada y no lo sabía pudo infectar a otras. En varios países en los que habilitaron todo prontamente se han disparado los casos y ha habido complicaciones. Es importante estar en casa”, cuenta. Algo que tampoco le gusta de lo que está viendo en Estados Unidos es que los médicos están siendo vulnerados por aquellos que piden que el aislamiento termine, aunque aclara que él no ha sido víctima. “Hay personas que han sido agresivas con los doctores, con el personal médico. Lo que exigen es que todo se reabra. Es algo muy difícil”.