Las autoridades de Bielorrusia acusaron a Polonia de volver a violar su frontera después de detectar la entrada de un helicóptero en su espacio aéreo, unas acusaciones similares a las vertidas por Minsk a principios de septiembre.
“La aeronave cruzó la frontera de Bielorrusia” penetrando 1,5 km en el interior del país, y “a las 4:00 p.m. el helicóptero volvió a violar la frontera del Estado, con una incursión de 300 metros”, precisó el ministerio bielorruso de Defensa en Telegram.
“Los radares de detección de la Fuerza Aérea han registrado la entrada de la aeronave polaca al otro lado de la frontera bielorrusa, según ha indicado el Ministerio. Posteriormente, el helicóptero volvió a violar el espacio aéreo bielorruso al cruzar la zona una segunda vez para sobrevolarla a lo largo de unos 300 metros, según informaciones de la agencia de noticias bielorrusa BelTA.
El Gobierno indicó que actualmente se están “aclarando las circunstancias” que rodean el incidente a medida que el Ministerio elabora la nota de protesta correspondiente.
El pasado 1 de septiembre, el Ministerio de Exteriores de Bielorrusia convocó al encargado de negocios de Polonia en el país, Wojciech Filimonovich, después de que un helicóptero polaco violara la frontera bielorrusa en el distrito Berestovitski de la región de Grodno.
El pasado 22 de septiembre, la Guardia Fronteriza de Polonia denunció nuevos ataques e intentos violentos de cruzar la frontera de forma ilegal por parte de una treintena de migrantes desde Bielorrusia.
“Un grupo de extranjeros agresivos ha llevado a cabo un ataque contra varios guardias fronterizos que se encontraban patrullando”, dijo la Guardia Fronteriza en un mensaje difundido a través de sus redes sociales.
Los migrantes, que han provocado daños en un vehículo oficial, han lanzado piedras y palos contra los agentes, si bien el incidente se ha saldado sin víctimas ni heridos. “Ninguno de los agentes fronterizos ha resultado herido”, subraya el texto.
La Guardia Fronteriza ha indicado así que durante los últimos días han tratado de ingresar en el país 34 migrantes procedentes de Bielorrusia. Además, ha indicado que un ciudadano georgiano ha sido detenido por trasladar a cuatro ciudadanos procedentes de Siria “cuya intención era llegar a Alemania”.
Frontera difícil
Desde 2021, Polonia y los Estados bálticos vienen acusando a Bielorrusia de utilizar la migración como forma de presión en represalia por las sanciones que la Unión Europea emitió tras las controvertidas elecciones en las que el presidente, Alexander Lukashenko, revalidó por quinta vez su mandato.
En julio de 2022, Polonia completó la construcción de una valla de 5 metros de altura y 186 kilómetros de longitud. A pesar de esto y la continua presencia de agentes polacos en la zona, los intentos por cruzar continúan.
Las autoridades polacas temen que la situación empeore ante la presencia de mercenarios del Grupo Wagner en las inmediaciones, una cuestión que ha sido tildado como “amenaza seria” para la seguridad de las fronteras.
Letonia junto al resto de países bálticos y Polonia han acusado al Gobierno bielorruso de Alexander Lukashenko de utilizar a miles de migrantes en represalia por las sanciones impuestas por la Unión Europea por la violencia postelectoral de agosto de 2020, cuando revalidó mandato por sexta vez.
Desde entonces todos estos países han reforzado sus fronteras, bien desplegando mayor presencia militar, o levantando vallas y muros para evitar estas “amenazas híbridas” como a bien tiene calificar. La presencia ahora del Grupo Wagner en los límites con Polonia ha puesto todavía más en alerta a Varsovia.
Alianza estratégica
El presidente ruso Vladímir Putin recibió el viernes a su homólogo y aliado bielorruso, que insinuó que Minsk podría sumarse a los esfuerzos de Moscú para revivir una antigua alianza con Pyongyang luego de la cumbre de esta semana con el mandatario norcoreano Kim Jong Un.
El presidente bielorruso Alexander Lukashenko hizo la propuesta durante su reunión con Putin en el balneario de Sochi, sobre el Mar Negro, donde el mandatario ruso dijo que le entregará un informe sobre las conversaciones con Kim en el puerto espacial de Vostochny, en el extremo oriente ruso.
“Quisiera informarle de la discusión sobre la situación en la región, que fue muy importante, y también mencionar el problema más grave, la situación en Ucrania”, afirmó Putin al iniciar el encuentro.
Lukashenko respondió que “podríamos pensar en la cooperación tripartita”, y añadió que “pienso que se podría encontrarle una tarea a Bielorrusia allí también”.