Desde que en los últimos días la Fiscalía hizo allanamientos en el Tribunal Supremo Electoral, Guatemala continúa en una crisis política. Según el Ministerio Público, su objetivo es revisar denuncias de supuestas irregularidades en la primera vuelta presidencial de junio y en la cual pasó a balotaje la exprimera dama, Sandra Torres, y el sociólogo, Bernardo Arévalo.
Este último fue quien terminó vencedor en los comicios generales de agosto y sucederá a Alejandro Giammattei. A tres meses de juramentarse en el cargo, el mandatario ya enfrenta ‘tropiezos’ con quienes ponen en ‘tela de juicio’ su victoria.
Por segundo día consecutivo, varias vías en Guatemala fueron bloqueadas este martes por miles de manifestantes. El foco de la protesta busca que dimita la fiscal general, Consuelo Porras, a quien señalan de gestar un ‘golpe de Estado’ para impedir la posesión del nuevo jefe de Estado.
Varios puntos ‘clave’ están cerrados
Los manifestantes, en su mayoría indígenas y campesinos han cerrado al menos 16 tramos de carreteras clave como la Interamericana; también las que conducen a las fronteras de México, El Salvador y Honduras. Así lo aseguró la dirección general de protección y seguridad vial.
La ciudad de Quetzaltenango, una de las más importantes en la nación centroamericana, sigue paralizada, luego de que se sumaran transportistas y obstaculizaran todos los accesos.
Como medida de prevención, las autoridades acordonaron el perímetro del aeropuerto internacional La Aurora de Ciudad de Guatemala, por sospechas de que los manifestantes buscaban tomar las instalaciones, de acuerdo con la Aeronáutica Civil.
Tensión por allanamiento al TSE
A comienzos de semana se registraron los primeros bloqueos, repudiando que se confiscaran las actas electorales, así como el pedido para retirar los fueros a los magistrados de ese organismo. La comunidad internacional ha expresado su condena internacional también por la suspensión al partido Semilla (que integra el mandatario electo).
Los manifestantes rechazaron, adicionalmente, la continuidad en el cargo de Porras; del jefe de la fiscalía contra la impunidad, Rafael Curruchiche; la fiscal Cinthia Monterroso; y el juez Séptimo Penal, Fredy Orellana. Los cuatro están en una lista de “actores corruptos” y antidemocráticos de Estados Unidos.
Las manifestaciones y bloqueos fueron convocados por los alcaldes comunales de los 48 cantones del departamento de Totonicapán, al oeste de la capital, pero al llamado se han sumado otros sectores.
Sigue la condena internacional
La Organización de Estados Americanos (OEA), Estados Unidos, España, la Unión Europea y organizaciones internacionales han lamentado el panorama en Guatemala al considerar que socava la democracia y gobernabilidad de ese país.
“(António Guterres) está alarmado por las recientes acciones del Ministerio Público que amenazan la confianza en el proceso democrático. Pide a todos los actores que defiendan el Estado de derecho y la voluntad democráticamente expresada”, dijo el portavoz del secretario general de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric.
Desde Estados Unidos, un vocero del Departamento de Estado afirmó que ese país “seguirá utilizando todas las herramientas disponibles contra quienes actúen para socavar la democracia y el estado de Derecho en Guatemala”.
La situación política llevó a que Bernardo Arévalo suspendiera su gira internacional e hiciera un llamado a la unidad para defender “cada voto”. Este martes anunció que había retomado su viaje para sostener encuentros con “actores importantes” de Estados Unidos.
“Esta mañana asistí a una reunión con el Americas Society/Council of the Americas @ASCOA en donde expuse las grandes líneas de nuestro plan de gobierno y los impactos que su implantación tendrá en el crecimiento, la generación de empleo y el bienestar de Guatemala”, dijo el mandatario.
*Con información de AFP y Europa Press.