Siria, uno de los territorios que presenta un conflicto civil sin precedentes para su nación, y que desde 2011 ha dirigido a la sociedad a una crisis humanitaria en donde miles de sirios han tenido que migrar hacia Europa o países vecinos con el fin de intentar rehacer sus vidas.

Sin embargo, algunas personas se niegan a abandonar su nación por los peligros que existen el camino, además de no contar con los recursos económicos suficientes para tan larga travesía.

Desde hace 12 años, los sirios han estado sobreviviendo a un conflicto en donde el gobierno de Bashar al-Ásad ha intentado mantener el control total de la nación árabe debido a que los rebeldes no han perdido la esperanza de poder derrocar al mandatario para, según ellos, proveer a Siria de democracia libre y participativa.

La niñez siria ha sufrido la intensidad de la guerra dentro y fuera de Siria. | Foto: REUTERS

Durante esta guerra interna, todas las etnias, culturas y credos han tenido que sufrir las consecuencias del conflicto. Sin embargo, existe una población que ha debido luchar en silencio por su vida mientras intentan permanecer fieles a su fe, a pesar de las amenazas de muerte por parte de radicales islámicos. Esta población marginada en su propia nación son los cristianos.

Adorar la cruz como sinónimo de persecución

La comunidad cristiana, quien representa el 10% de la población siria, ha sido el centro de violencia, persecución y violencia selectiva por parte de organizaciones criminales internacionales como el Estado Islámico, apuntó El Debate.

Según informes, desde el 2011, por lo menos 1.100 cristianos han sido ejecutados en el marco del estallido social en contra de al-Ásad, además de estimarse que más de 200 templos religiosos cristianos se han reducido a escombros. Por otro lado, la migración de cristianos hacia otras naciones, en donde no corran peligro por su fe, se apunta en un 70%, a sabiendas que Siria fue uno de los primeros territorios cristianos en el mundo.

No obstante, el 30% de los cristianos que aún permanecen en Siria afrontan una dramática realidad en donde no hay suficiente suministro de comida, medicamentos, energía eléctrica y gasolina, además de tener que lidiar con las sanciones económicas internacionales puestas al gobierno de Damasco, sin contar las consecuencias producto del terremoto ocurrido en febrero de 2023 y la pandemia de covid-19 en 2020.

Los campamentos para refugiados sirios son lugares de combates entre radicales nacionalistas y los ciudadanos árabes. | Foto: REUTERS

Aunque esta minoría siria recibe ayuda humanitaria de varias organizaciones religiosas como Cáritas, el Consejo Pontifico Cor Unum y la Ayuda de la Iglesia Necesitada (ACN) no ha sido suficiente para cubrir todas las necesidades que requieren los cristianos en territorio árabe. No obstante, estas instituciones también proveen de “esperanza y consuelo espiritual” a los fieles que se acercan pidiendo ayuda y fortaleza en momentos tan difíciles. Aún así, esta comunidad se siente excluida por la comunidad internacional y la presa, según el medio citado.

Más del 70% de los cristianos sirios han abandonado la nación. | Foto: REUTERS

La fe mueve montañas

El tema de los cristianos en Siria no ha sido ajeno para el Vaticano, especialmente para el papa Francisco ya que, durante todo su pontificado iniciado en 2013, ha evidenciado la crisis humanitaria que ha provocado el conflicto civil sirio. De hecho, en su mensaje en la Conferencia Sobre la Iglesia en Siria, el sumo pontífice ha aseverado que “no nos hemos olvidado (de los sirios), la Iglesia sigue especialmente preocupada por su bienestar, porque son los protagonistas de la misión de Jesús en esa tierra”.

Asimismo, el sucesor de Pedro ha exhortado a la comunidad católica, y cristiana en general, en orar por la persecución cristiana en países donde los seguidores de la religión de Roma son objeto de burlas y asesinatos, una cuestión que también se debe por la intromisión de grupos terroristas a la soberanía siria como lo es el Estado Islámico.