El pasado miércoles 23 de agosto Rusia confirmó la muerte de Yevgueni Prigozhin, el líder del grupo de mercenarios Wagner, que ha sido fundamental en la invasión de Rusia a Ucrania y ha trabajado en la sombra, con el ejército ruso.
Wagner además ha estado ligado a trabajo militar a través de mercenarios, en distintos conflictos internacionales como el conflicto interno en Siria. Wagner alcanzó el reconocimiento internacional al apoyar los movimientos separatistas en Ucrania, en la Guerra del Dombás, entre 2014 y 2015.
Estructura de Wagner
El Grupo Wagner, creado por Prigozhin y que comenzó a ejercer sus funciones desde 2014, es un grupo paramilitar que inicialmente se encontraba afiliado de forma tangencial al Ejército del país, aunque legalmente no existía.
Por años Wagner fue negado por sus creadores y por el gobierno, porque en Rusia estaba prohibida la contratación de servicios militares, a través de mercenarios. En la práctica en la invasión de Rusia a Ucrania el aporte de Wagner ha sido tan importante, que se han adjudicado la conquista de varios puntos de Ucrania.
Desde la muerte de Prigozhin, que de hecho viajaba en el avión con Dmitry Utkin, quien era la mano derecha del líder del Grupo Wagner y además confundador del grupo, los movimientos rusos de extrema derecha cercanos al sector militar han lementado la desaparición del grupo,
De acuerdo con declaraciones de Lucas Webber, cofundador de la red de investigación Militant Wire, consultado por la Agencia AFP, Prigozhin simbolizaba la valentía de la milicia rusa en muchos sectores: “describen una élite política y militar decadente, corrupta y desconectada de la realidad del frente. Prigozhin, en cambio, era considerado como un personaje valiente que no temía criticar a la jerarquía militar y visitaba con frecuencia a sus hombres en combate”.
Diferencias con el ejército
Durante la invasión de Rusia a Ucrania, Prigozhin estuvo constantemente criticando los resultados del ejército oficial y alimentando la idea de que su grupo de mercenarios, con menos recursos, lograba mejores resultados en el contexto de la invasión.
El líder de Wagner, quien llegó a ser un oligarca y era muy cercano a Putin antes de la rebelión, se quejaba además de la falta de apoyo a Wagner, en términos de municiones y equipos militares.
Estas diferencias y las victorias de Wagner en el terreno muestran además de la distancia, la confianza que ha tenido el oficialismo ruso, al menos de parte del presidente Vladimir Putin, en entregar a un poder paralelo, parte del poder militar a un grupo que está fuera de la legalidad.
Modelo de negocio
A pesar de la caída del líder del grupo y de algunos de sus miembros más importantes, es poco probable que sea el final en Rusia, de ese modelo de contratar mercenarios que luchen a través de métodos que están más del lado de la ilegalidad.
En el caso de Wagner, el grupo siempre se ha nutrido siempre de exconvictos. El propio Prigozhin habría recorrido personalmente distintas prisiones rusas, para reclutar al menos a mil convictos, que fueron incluidos a Wagner.
El modelo podrá cambiar a futuro esos sí, teniendo en cuenta el motín que protagonizó Prigozhin el pasado mes de junio, justo dos meses antes de su muerte, cuando los mercenarios dieron la vuelta de Ucrania e iniciaron la incursión a su país, buscando la venganza por las tensiones constantes entre el Ministerio de Defensa Ruso y el grupo.
“Una lección que Putin probablemente aprendió del motín de junio es el peligro de dar tanto poder y responsabilidad (...) a un solo hombre”,afirmó Catrina Doxsee, especialista en mercenarios del laboratorio de ideas CSIS de Washington, de acuerdo con la Agencia AFP.
Pero el modelo de las SMP, Sociedades Militares Privadas rusas, no parece tener un pronto final: “Rusia tratará de conservar el modelo de las SMP para su política exterior y su asistencia en materia de seguridad, pero es probable que el mercado se diversifique para evitar la emergencia de un nuevo Prigozhin”, explicó Doxsee.
Ya en la mira hay varios grupos como como Redut, Convoy o Patriot, que podrían reemplazar a los temidos mercenarios del grupo Wagner.