El papa Francisco, que recientemente se enfermó de una gripe, fue trasladado este miércoles a un hospital del centro de Roma tras su audiencia semanal para unas pruebas diagnósticas, según lo dicho por el Vaticano, que no ofreció más detalles.
Francisco llegó al Hospital Universitario Gemelli, en la isla Tiberina de la capital italiana, a bordo de un pequeño Fiat 500 de color blanco y, tras una breve visita, se marchó escoltado en el mismo auto.
“Después de la audiencia general, el papa Francisco fue al hospital Gemelli en la isla Tiberina para los exámenes de control. Luego regresó al Vaticano”, anunció la Santa Sede en un comunicado.
En el transcurso del día, el pontífice, de 86 años, entró en una silla de ruedas en la sala de audiencias del Vaticano y parecía cansado mientras se dejaba caer pesadamente sobre su asiento.
¿Qué problemas de salud enfrenta el pontífice?
En el año 2020, Francisco sufrió de un fuerte resfriado provocado por el golpe que daba en ese tiempo la pandemia por el covid-19. Dicho malestar lo obligó a cancelar varias de sus reuniones, además de su retiro anual del Vaticano.
En 2021 le extirparon parte del colon causado por una inflamación intestinal y desde 2023 el pontífice ha tenido que movilizarse en silla de ruedas o usar bastón por su esguince en los ligamentos de su rodilla y fractura en la articulación que le han impedido caminar.
Finalmente, en el año 2023 el papa fue sometido a una operación abdominal por una hernia incisional lacerada, en la que optó por tomarse varios días de recuperación por recomendación de su médico, ya que en días anteriores había estado hospitalizado.
Cuando joven, alrededor de los 21 años, al papa le extirparon el lóbulo superior del pulmón después de una neumonía grave.
El papa Francisco padece de diverticulitis, una enfermedad común que puede causar la inflamación o infección del colon.
Desde el pasado 24 de febrero Francisco viene con complicaciones de salud debido a su ‘resfriado’; sin embargo, el Vaticano se ha limitado en dar respuestas sobre lo que estaría pasando, pues cada día argumentan que los síntomas “persisten sin fiebre” y por ello han suspendido algunas de las audiencias. En la más reciente que se dio este miércoles 28, el papa dijo a sus fieles: “Todavía estoy un poco resfriado”.
Entre cancelación y celebración de su agenda desde hace unos días, Francisco había cancelado sus audiencias del pasado sábado y lunes. Sin embargo, celebró la oración del Ángelus el domingo desde su ventana sobre la Plaza de San Pedro.
En su alocución, Francisco recordó “con tristeza” el segundo aniversario del inicio de la “guerra a gran escala en Ucrania”.
“Tantas víctimas, heridos, destrucción, aflicción, lágrimas, en un período que se hace terriblemente largo y cuyo fin todavía no se vislumbra”, declaró el pontífice.
Ante cualquier eventualidad frente a la salud del papa Francisco, el Vaticano indicará cualquier noticia por medio de sus redes y comunicados oficiales. No se descarta que el pontífice sea llevado de nuevo al centro de salud de Roma si persisten los síntomas de gripa.
*Con información de AP y la AFP.