Después del escándalo mundial por la detención de Julian Assange en la embajada del Ecuador en Reino Unido a comienzos de esta semana, los Whistleblowers -como se les conoce en inglés a los delatores de información confidencial- volvieron a estar en el centro de las noticias. Si bien la tecnología permitió a los ya conocidos Julian Assange, Chelsea Manning y John Snowden alcanzar fama mundial por el volúmen de lo que delataron, los whistleblowers existen desde mucho antes. De hecho, Samuel Chaw, fue uno de los primeros en delatar las torturas que se les aplicaban a los soldados británicos durante la Guerra de la Revolución en 1777. Gracias a él, el Congreso de Estados Unidos promulgó una ley que defiende a los denunciantes de casos de corrupción, tortura, asesinato o cualquier otra irregularidad de parte del Estado. Le puede interesar: Assange pasa su primera noche detenido e inicia combate contra la extradición Después de Shaw, muchos otros delatores pusieron en el paredón a los grandes poderes del mundo y a los políticos que ordenaron violaciones a los derechos humanos sin decirles a sus ciudadanos. Por supuesto, el fundador de WikiLeaks se llevó todos los flashes al revelar en 2010 el mayor número de documentos confidenciales en la historia de la humanidad. Documentos que demostraron que Estados Unidos ordenó la captura, tortura y posterior asesinato de cientos de prisioneros en las guerras del Medio Oriente sin darles un debido proceso. Al poco tiempo, WikiLeaks filtró además las barbaries que los soldados estadounidenses cometieron en la cárcel de Guantánamo. A 6 años de esas filtraciones, Assange volvió a estar en el ojo del Huracán por beneficiar la candidatura de Donald Trump al desplegar una serie de correos electrónicos que dejaban mal parada a la entonces candidata Hillary Clinton. Pues allí se demostró que la demócrata tuvo conversaciones con banqueros importantes para obtener dinero de maneras oscuras. Debido al amor y odio que despiertan estos sujetos alrededor del mundo y de la coyuntura por la detención de Julian Assange, SEMANA recopiló cuatro películas y documentales que causaron impacto internacional por contar a fondo sus historias. Solo usted, como espectador, puede decidir si el hackeo es un delito o un acto heróico. El debate sigue sobre la mesa. _____________________________________________________________________________ Citizen Four: Esta película documental dirigida por la aclamada directora Laura Poitras fue lanzada en 2014 en Estados Unidos. Poitras cuenta cómo Edward Snowden, el trabajador de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos, reveló que el gobierno no solo vigila a las otras naciones, sino también a los ciudadanos de a pie de su propio país. Citizenfour ganó el premio de la Academia por mejor documental largo. Además, recibió cientos de halagos por cómo la directora manejó el tema de seguridad a la hora de entrevistar a Snowden, pues sus vidas podían estar en peligro.
Risk: Este otro documental gira en torno a la vida de Julian Assange y desemboca en los famosos correos de Hillary Clinton. El rodaje duró seis años y de nuevo la directora Laura Poitras investigó a fondo la figura de Assange para, de una manera u otra, concluir que el tipo es un “narcisista” y que, en realidad, lo que lo mueve no es el bien común. El fundador de WikiLeaks criticó ampliamente el documental y dijo que está muy alejado de la realidad, a pesar de que en varias escenas él participa directamente.
Le sugerimos: Ecuador retira el asilo diplomático a Julian Assange Snowden: fuera de los documentales, está Snowden, una película biográfica y de suspenso estadounidense de 2016, dirigida por el premiado Oliver Stone y escrita por él y Kiera Fitzgerald. La película está basada en los libros The Snowden Files de Luke Harding y Time of the Octopus de Anatoly Kucherena. El rodaje comenzó en febrero de 2015 en Múnich y refleja claramente las peripecias, temores y angustias por las que pasó Edward Snowden antes de filtrar la información. Sentirá que nos ven, nos escuchan y nos analizan todo el tiempo.
The Post. Los oscuros secretos del Pentágono: The Post es la película más reciente y tal vez la más conocida en esta lista. Pues aunque no habla acerca de la vida de un hacker, sí muestra la de uno de los más importantes informantes del siglo XX. The Post, protagonizada por Tom Hanks y Meryl Streep, narra la historia de la primera directora mujer de un diario en Estados Unidos, The Washington Post y la de su editor en jefe, Ben Bradlee, cuando empujan una batalla sin precedentes entre periodistas y gobierno con la publicación de los Papeles del Pentágono y los secretos de la Guerra de Vietnam.