Cuba abrió procesos penales contra manifestantes que protestaron durante el apagón generalizado que provocó el paso del huracán Ian por la isla a finales de septiembre, informó el viernes 14 de octubre la Fiscalía General de República, sin precisar la cantidad de personas imputadas.
Estas inusuales protestas en barrios, especialmente de la capital, irrumpieron el 28 de septiembre, un día después de que Ian golpeara violentamente las provincias más occidentales del país, incluida La Habana, y de que el sistema eléctrico nacional colapsara, dejando la isla a oscuras.
“Fiscalía General de la República controla procesos penales en los que se investigan hechos que perturbaron el orden público y la tranquilidad ciudadana”, dijo la dependencia en una nota informativa.
De acuerdo con la comunicación, los delitos están relacionados con “incendio de instalaciones, la ejecución de actos vandálicos, el cierre de vías públicas (...), agresiones y ofensas a funcionarios y fuerzas del orden, y la incitación a la violencia”.
La dependencia dijo que también “se realizan acciones de prevención con los padres que utilizaron a hijos menores de edad” en las manifestaciones.
En varias zonas de la capital, de 2,1 millones de habitantes, ocurrieron protestas y cacerolazos durante varios días, en los que los pobladores también cerraron calles con contenedores de basura.
Durante dos noches seguidas se cayó el servicio de internet en el país, mientras que en La Habana se desplegó un fuerte operativo de seguridad con policías uniformados, agentes vestidos de civil y brigadas integradas por personas afines al Gobierno.
Pese a que la electricidad se reinstaló rápidamente en casi toda la ciudad, los habaneros desesperaron porque los prolongados apagones ponían en peligro los escasos alimentos que atesoraban en sus congeladores e impedían también el servicio de agua.
El sitio de periodismo de datos Proyecto Inventario informó en su cuenta de Twitter que entre el 29 de septiembre y el 12 de octubre registró “al menos 92 protestas, ocurridas en 11 de las 15 provincias del país”.
La AFP pudo constatar la aprehensión de al menos dos jóvenes manifestantes el domingo 2 de octubre en una protesta en Línea, una céntrica avenida de la ciudad.
Estos cacerolazos ocurrieron 14 meses después del histórico 11 de julio, cuando miles de cubanos protestaron al grito de “Libertad”.
Cerca de 500 manifestantes del 11 y 12 de julio recibieron condenas, algunos de hasta 23 años de cárcel, según la Fiscalía.
Las manifestaciones continúan
Después de que se hubiera cortado el servicio de internet en el país tras el pago del huracán, las manifestaciones se exacerbaron y desde ese momento casi a diario se han registrado en las redes sociales protestas de ciudadanos en varias ciudades.
Presentando imágenes y audio de un cacerolazo, un usuario en Twitter muestra aún este viernes manifestaciones en Santa Clara, provincia central de Cuba. “Urgente, cacerolazo en la Vigía en Santa Clara hace minutos, unión, griten libertad, libertad”, comparte el usuario.
Apenas este jueves pasado, el diario digital cubano 14 y medio publicó información sobre protestas que se estaban desarrollando en Bejucal, un municipio de la provincia de Mayabeque. Allá también se usaron las cacerolas para llamar la atención.
De acuerdo con algunos testimonios compartidos al medio digital, en los últimos días el gobierno estaría usando una estrategia de represión distinta a la retención inmediata de los manifestantes, que consistiría en grabarlos, para luego buscarlos en sus viviendas. “No reprimieron anoche porque hoy revisarán los videos e irán a buscar a la gente que reconozcan”, dijo al medio una de las personas que protestó este jueves.
*Con información de la AFP.