Hace poco más de diez años, Volodímir Zelenski no se imaginaba el rumbo que iba a tomar su vida. Era un exitoso comediante con una laureada carrera en la televisión y en el cine local. Fue actor, director y guionista de muchas de las producciones de entretenimiento. Pero en poco tiempo todo terminó dando un vuelco que lo ha convertido actualmente en un héroe de guerra en su país natal.
El viaje de Zelenski arranca en 2015 con su trabajo consagratorio en la serie Servidor del pueblo, en la que interpretaba un profesor que por azares del destino termina convertido en presidente. Este proyecto le trajo fama y reconocimiento en los ucranianos, que veían en él una figura capaz y cercana al pueblo.
De cara a las elecciones de 2019, Zelenski se registró como candidato en el movimiento político de mismo nombre del programa que había protagonizado hace algunos años y gracias al cual muchos de sus votantes veían capaz, al entonces actor, preparado para ser presidente. El comediante convertido en presidenciable terminó con 75 por ciento de los votos en segunda vuelta y dio un giro total en su vida.
Tres años después, Volodímir Zelenski ha dejado totalmente cualquier rezago del humo con el que trabajaba en el pasado, esto a pesar de que su única preparación real para el cargo había sido fingir haber dirigido el país. Sin embargo, este líder improbable se convirtió en un héroe de guerra después de que Rusia anunció una invasión a Ucrania.
Zelenski no ha mostrado miedo en ningún momento al retar al Gobierno de Vladímir Putin. Desde que asumió la presidencia les dio su apoyo irrestricto a las tropas que combaten a los rebeldes prorrusos en la zona fronteriza del Donbás, así como aboga constantemente por la inclusión de Ucrania en la Unión Europea y en la Otan, a pesar de las constantes protestas desde Rusia.
Con la declaración de guerra de parte de Putin y su régimen, Zelenski tampoco ha dado el brazo a torcer a pesar del poderío superior evidente de Rusia. El mandatario ucraniano permanece en Kiev como un líder militar, motivando constantemente al Ejército y a la ciudadanía a que resistan.
Los mensajes de Zelenski hacia el mundo le han servido para ganar fama al mostrar una posición serena, decidida, pero a la vez fuerte en pedir a la comunidad internacional que deberían brindar más apoyo a Ucrania en su defensa contra Rusia, siendo un ícono de la lucha frente a Putin, disparando su favorabilidad no solo entre la ciudadanía, sino también en el exterior.
Muestra de esto, es que los Estados Unidos pusieron sobre su mesa una posibilidad para poder evacuarlo del país en total seguridad, pero el presidente dio una respuesta que no muchos líderes mundiales habrían tenido la capacidad de dar. “La pelea está aquí; necesito municiones, no un aventón”, declaró.
El coraje y la gallardía de Zelenski no han pasado desapercibidos en la población, que sin importar el destino de la guerra jamás olvidarán la figura de quien supo enfrentar a las oscuras fuerzas rusas y su avanzada por tierra, mar y aire. Según la firma ucraniana Rating, la popularidad del presidente pasó de 35 a 91 por ciento en cuestión de dos meses.
Lo que pueda ocurrir con Volodímir Zelenski es un enigma aún, pero, sin duda, el mandatario no solo ha conquistado la admiración de Ucrania y el mundo, sino que seguramente, tendrá un espacio reservado en los libros de historia como un presidente que, a pesar de su corta preparación, supo plantar cara a la invasión rusa y se convirtió para siempre en un héroe nacional.
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