Desde hace un mes, los trabajadores mantienen una huelga a las afueras del almacén de Amazon en la ciudad de Palmdale, al norte de Los Ángeles, obstaculizando la entrada y salida de las furgonetas que reparten los paquetes de la compañía.

La protesta “no es solo aquí, queremos hacer esto en todo el país”, dijo en el lugar Michael Leib, un chofer de 31 años que trabaja para Battle-Tested Strategies (BTS), una de las más de 3.000 empresas que entregan paquetes para Amazon exclusivamente.

Obligados a trabajar a una velocidad relámpago y hartos de las precarias condiciones de las furgonetas rotuladas con el logotipo de Amazon, que no tienen aire acondicionado y cuyas ventanas no abren, los trabajadores de BTS crearon un sindicato en abril.

Exigían entonces mejores condiciones contractuales y un aumento de salario. Pero cuando faltaba una semana para que se sindicalizaran, Amazon anunció que cancelaba el contrato de BTS. Así, desde finales de junio, el gigante de ventas en línea suspendió sus compromisos contractuales con la empresa tercerizada.

Amazon espera poder aliarse con grandes compañías que prestan servicio de telefonía celular | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

“Queremos mejores condiciones de trabajo y más salario”, dijo Leib. “Y que una compañía multimillonaria no quiera eso para nosotros no es justo”.

“Te van a aplastar”

Críticos afirman que Amazon, que se ha opuesto firmemente al trabajo sindicalizado en su masiva fuerza laboral, ha reaccionado de forma similar en otras ocasiones.

En 2017, en Michigan, el contrato de otra empresa tercerizada cuyos conductores crearon un sindicato fue anulado. De la misma manera, el año pasado, cuando los empleados de Amazon en un almacén en Nueva York votaron para sumarse a un gremio, la compañía emprendió acciones legales para prohibirles hacerlo.

“Amazon emplea tácticas de miedo y de antisindicalismo de manual”, afirmó Christian Castro, un portavoz de Teamsters, la poderosa organización que representa a camioneros de Estados Unidos y a la que se afiliaron los trabajadores de BTS.

Trabajadores que pertenecen al sindicato de Amazon protestaron en Nueva York el pasado mes de noviembre | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

“Intentas defenderte como trabajador, como persona, y te van a aplastar, te van a eliminar”, añadió. El gremio presentó una denuncia por prácticas laborales desleales contra Amazon ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales y los conductores de BTS iniciaron la acción de protesta.

Si la agencia federal compra la pelea y obliga a Amazon a negociar con el sindicato al cual se afiliaron los conductores de BTS, su modelo de negocios podría sufrir alteraciones.

Amazon no respondió a los pedidos de AFP para comentar el caso, pero ha dicho en comunicados que los trabajadores de BTS, al igual que los de otras empresas tercerizadas, no trabajan para la compañía y los acusa de difundir una narrativa “falsa”.

Los trabajadores de BTS refutan. “Trabajamos para Amazon porque llevamos sus camisetas, repartimos sus cajas, conducimos sus furgonetas, sus etiquetas de envío están en todas las cajas”, dijo Leib.

“Cuando pedí un aumento de sueldo, el dueño de la empresa (BTS) me dijo: ‘Bueno, déjame preguntarle a Amazon, a ver si puedo sacarles más dinero para poder pagarte’”, completó.

“Condiciones muy duras”

Leib dice que ha soportado tres años de trabajo en “condiciones muy duras”, incluidas temperaturas de hasta 54 °C en el interior de su furgoneta durante los sofocantes veranos de California. Los conductores deben entregar más de 400 paquetes al día y los supervisores controlan su progreso.

“Tienes a los despachadores respirándote en la nuca, diciéndote: ‘Oye, ¿qué está pasando? ¿Por qué vas más despacio?’”, dijo el conductor. “Sentí agotamiento por el calor. Sentí náuseas, casi me desmayé el año pasado”, recordó.

“Trabajamos para Amazon porque repartimos sus cajas, conducimos sus furgonetas, sus etiquetas de envío están en todas las cajas”, dijo Leib. | Foto: BBC

Amazon afirmó en un comunicado que rescindió el contrato con BTS porque el subcontratista no cumplía sus objetivos. El jefe de BTS, Johnathon Ervin, un veterano militar, lo niega y afirma que sus empleados batían récords y entregaban hasta 20.000 paquetes al día.

La empresa de Ervin fue citada como ejemplo en un boletín de Amazon en 2020. En noviembre pasado, una revisión de rendimiento de Amazon dijo que el riesgo de no renovación de BTS era “bajo”. Según Ervin, Amazon sabía desde hacía más de un año que los conductores de reparto de Palmdale querían sindicarse. El pasado agosto, Amazon se dirigió a BTS con una oferta educacional.

“Se suponía que era un taller laboral, pero terminó siendo una formación antisindical”, dijo. “Dijeron que si los trabajadores se sindicalizaban, cancelarían nuestro contrato y nos dieron estrategias sobre cómo impedirlo”.

Con información de AFP*