La Policía española desarticuló en las últimas horas a una organización delincuencial que presuntamente facilitaba pasaportes covid falsos en diferentes países de la Unión Europea.

Las autoridades detuvieron a siete personas, seis en Madrid y una en la provincia de Barcelona, por los presuntos delitos de falsedad documental y contra la salud pública.

De acuerdo con las autoridades policiales, lograron constatar que los detenidos habían inscrito de manera fraudulenta a unas 1.600 personas en el Registro Nacional de Vacunación.

Además, todo parece indicar que la organización criminal también habría captado a personal sanitario que introducía en el registro a quienes requerían las certificaciones falsas.

La autoridades españolas también se encuentran investigando el posible robo de claves de acceso al mismo, claves con las que igualmente registraban a personas no vacunadas para que les apareciera la pauta de vacunación completa y pudieran obtener la documentación que necesitaban, según indicó el portal español eldiario.es.

Por lo tanto, todo parece indicar que los detenidos ofrecían en aplicaciones de mensajería instantánea, tanto pruebas PCR falsas, como pasaportes covid falsificados.

Las autoridades españolas advirtieron que la operación continúa abierta y que, por el momento, han detenido e identificado a los líderes de la organización criminal que operaba desde Francia. Por otra parte, se ha indicado que las 1.600 personas que adquirieron las pruebas fraudulentas quedaron sujetas a investigación.

Libres en Colombia falsificadores de carné de vacunas contra la covid-19

Como si se tratara de un emprendimiento familiar, en un café internet del municipio de Zipaquirá, Cundinamarca, una pareja arrancó un negocio criminal que apenas duró 30 días. Desde su fachada suplantaron a todo el sistema de salud del país mientras ofrecían carné de vacunas contra la covid-19.

Los dos capturados lograron impulsar su negocio ilícito, de acuerdo con la Fiscalía, al punto de que diariamente imprimían hasta 50 carnés falsos de vacunas, que incluso eran distribuidos en Bogotá. El emprendimiento ilegal de esta pareja ‘encontró su agosto’ en pleno enero, justamente por las necesidades y exigencias de las autoridades por ese documento.

La iniciativa criminal no tenía un gran andamiaje, como suele ocurrir con otro tipo de redes dedicadas a la falsificación. Desde su pequeño establecimiento y con una impresora casera, lograron convertir un pedazo de papel en un documento con todas las señas de ser un registro original.

De acuerdo con lo dicho por la Fiscalía, sobre la cantidad de documentos falsos que se imprimieron en este falso café internet en Zipaquirá y la cantidad de días estuvieron en la misma actividad, se entenderían que hay en circulación más de 1.500 carnés falsos de personas que se acercaron y lo adquirieron para hacerle ‘conejo’ a las autoridades sanitarias.

Quienes los compraron por un valor aproximado de 50 mil pesos, le habrían dejado una lucrativa ganancia a los falsificadores. Más de 70 millones de pesos que obtuvieron gracias a la fraudulenta maniobra de imprimir los carnés de vacunas contra el covid y entregarlos a quienes de forma descarada e inconsciente atentan contra la salud de sus vecinos.

“La Fiscalía General de la Nación, a través de la seccional de Cundinamarca con la cooperación de la Policía Judicial Sijín, logró la captura y judicialización de dos presuntos falsificadores de carnés de vacunación contra el covid19″, dijo la Fiscalía luego de capturar a los responsables de la falsificación.

A pesar del operativo, de la incautación de los elementos, de las pruebas en su contra y las declaraciones de quienes compraron esos carnés falsos, un juez de control de garantías dejó en libertad a los capturados; no en un acto de insensatez, solo que la ley lo establece así para esa clase de delitos.

“De acuerdo con las investigaciones, los procesados vendían los certificados a 50 mil pesos cada uno y eran elaborados en un café internet de Zipaquirá, (Cundinamarca) para ser comercializados en Bogotá y en varias poblaciones de este departamento”, aseguró la Fiscalía.

Al perecer el delito de falsedad material en documento público no tiene en cuenta la gravedad o el impacto del documento falsificado, como en este caso que el documento a falsificar era el carné de vacunas contra la covid-19, en un momento de impulso en los contagios, no se trata de falsificar la entrada al cine, hay una gran diferencia.

La Fiscalía advirtió, sin embargo, que los capturados, a pesar de quedar en libertad seguirán atados al proceso y se presentará en tiempo de ley el escrito de acusación en su contra, de cara a un juicio y una eventual condena en su contra.