El jefe del Pentágono, Lloyd Austin y el ministro de Defensa chino, Li Shangfu, se saludaron y hablaron brevemente en la cena inaugural de la cumbre el viernes, pero no mantuvieron un encuentro formal como había pedido Estados Unidos y China había rechazado.
Sin embargo, ha habido algunas señales de una mejora del diálogo entre ambos países.
El sábado, Austin defendió que el diálogo en materia de defensa entre ambas potencias es “esencial” para reducir los riesgos de conflicto.
Y el director de la CIA, William Burns, realizó un viaje secreto a China el mes pasado, según anunció el viernes un responsable estadounidense.
En los próximos días, el subsecretario de Estado para el sudeste asiático, Daniel Kritenbrink, visitará también el gigante asiático.
Pero, en paralelo, los ejércitos de ambos países se enzarzaron en maniobras peligrosas en dos de las zonas más sensibles de la región: el estrecho de Taiwán y el mar de China Meridional.
Buques de guerra de Estados Unidos y Canadá navegaron el sábado por el estrecho que separa China y la isla autogobernada de Taiwán.
Estados Unidos acusó a un barco militar chino de maniobrar de “forma peligrosa” cerca de su destructor Chung-Hoon.
“Pido a los dirigentes (chinos) que tomen las medidas necesarias para poner fin a este tipo de comportamiento”, declaró el domingo en Singapur Austin, refiriéndose al incidente del día anterior.
Advirtió que “podrían producirse accidentes y alcanzar enormes proporciones”.
“Lo mejor sería que todos los países, y en particular sus aviones y buques de guerra, se abstuvieran de entrar en el espacio aéreo y las aguas territoriales de otros países”, dijo por su parte Li.
Días antes, Estados Unidos había denunciado una “maniobra innecesariamente agresiva” de un caza de combate chino contra uno de sus aviones de vigilancia en el mar de China Meridional.
Pekín considera Taiwán como parte de su territorio y también reivindica su soberanía sobre la mayoría del mar de China Meridional.
En Singapur, el portavoz del Pentágono, Pat Ryder, denunció las actividades cada vez más arriesgadas y coercitivas del Ejército Popular de Liberación en la región, incluso en días recientes.
Un alto cargo de Defensa estadounidense también dijo a los reporteros que “las acciones hablan más alto que las palabras”.
“El comportamiento peligroso que hemos visto del Ejército Popular de Liberación alrededor del estrecho y en los mares del Sur y del Este de China y más allá lo dicen todo”, aseguró.
A su vez, el ministro de Defensa chino denunció este domingo el establecimiento de alianzas militares “tipo OTAN” en la región Asia-Pacífico, que según él puede desencadenar una “torbellino” de conflictos.
Las declaraciones del ministro Li Shangfu ocurren un día después de que buques militares de China y Estados Unidos maniobraran peligrosamente cerca en el estrecho de Taiwán, un suceso que provocó el enfado de ambas potencias.
“Los intentos de impulsar (alianzas) tipo OTAN en Asia-Pacífico son una forma de secuestrar a los países de la región y de exagerar los conflictos y las confrontaciones”, dijo Li en la cumbre de seguridad Shangri-La en Singapur a la que asiste también su homólogo estadounidense, Lloyd Austin.
Este tipo de alianzas no harán “sino hundir Asia-Pacífico en una torbellino de disputas y conflictos”, advirtió el ministro chino en la cumbre más importante sobre seguridad en la región.
Li no mencionó directamente a ningún país, pero pareció referirse a Estados Unidos, que ha estado reforzando sus alianzas en la región.
La potencia norteamericana forma parte de la alianza Aukus junto a Australia y Reino Unido. También integra el grupo QUAD con Japón, India y Australia.
“Hoy en día, Asia-Pacífico necesita una cooperación abierta e inclusiva, no agruparse en pequeñas camarillas”, insistió Li.
“No debemos olvidar los graves desastres que trajeron las dos guerras mundiales a las poblaciones de todos los países, y no debemos permitir que se repita una historia tan trágica”, agregó.
*Con información de AFP