En la noche del pasado 16 de noviembre, la joven de 24 años Rafaela Alves dos Santos murió al ser arrastrada por una cinta transportadora de una trituradora de papas y posteriormente aplastada por el motor de la máquina. Todo sucedió en la fábrica Bem Brasil Alimentos, ubicada en Perdizes, al sureste de Brasil.

De acuerdo con el diario brasileño O Globo, que reporta el caso, la Policía Militar informó que, según los testigos, la joven se subió sobre la cinta para llevar a cabo la separación de los escombros y las papas, para lo cual apagó la máquina.

De un momento a otro la máquina se encendió, de tal manera que no fue posible evitar que arrastrara a la joven, quien recibió el impacto del motor, el cual le causó un trauma craneoencefálico que acabó con su vida. Aún no se sabe con claridad cuál sería la causa de que la máquina se hubiera encendido de nuevo.

Un futuro mejor

De acuerdo con su mamá, la joven había llegado a la ciudad de Minas Gerais donde está ubicada la fábrica, junto con su hermana mayor y dos primos, buscando un futuro mejor. Fue contratada por una empresa temporal, que la vinculó con la fábrica de papas procesadas.

La mamá de Rafaela dijo que la joven era licenciada en técnica de enfermería, pero aunque no ejercía su profesión, esperaba hacerlo. Además, habló con O Globo de la relación estrecha que tenía con la joven:

“Rafaela era mi amor. Mis otras hijas estaban celosas porque teníamos una conexión muy extraordinaria. Era una niña cariñosa, vanidosa, a la que le encantaba disfrazarse, comprar zapatos, ropa, perfumes... Ella fue tras el futuro, fue tras sus sueños, que era trabajar en su área y cuidarme”, dijo su madre.

La mamá de la mujer contó que se enteró de la muerte de su hija por la prensa local y dijo que no recibió ninguna explicación de la empresa sobre la causa del mal funcionamiento de la máquina ni tampoco ayuda para llevar el cuerpo a su ciudad natal.

Realmente, fue con la ayuda de la comunidad que logró traer el cuerpo: “Solo tengo que agradecer a todos los que me están ayudando en este momento de alguna manera. Que suelten pronto su cuerpo y lo traigan a casa para que me quede un ratito con ella y mate la nostalgia y, apenas amanezca, dar una sepultura digna de mi hija”, le dijo al citado medio recién sucedieron los hechos.

La empresa lamentó el fallecimiento en un comunicado, sin dar mayor información sobre lo sucedido: “Con pesar, Bem Brasil lamenta el fallecimiento de un empleado de una tercera empresa contratada, que presta servicios a Bem Brasil en el municipio de Perdizes/MG. El incidente ocurrió en la noche de este miércoles (16/11). Siguiendo su política de seguridad en el trabajo, Bem Brasil ya inició el proceso de investigación de la causa junto con los órganos competentes”.