El expresidente estadounidense y candidato a las elecciones previstas para 2024, Donald Trump, ha calificado de “terrible error” la política sobre el aborto en el estado de Florida, cuyo gobernador es Ron DeSantis, uno de sus principales rivales en la carrera para hacerse con la candidatura republicana a las presidenciales.
Aborto en Estados Unidos
Trump, que allanó el camino durante su mandato para revertir el fallo judicial Roe vs. Wade, el cual garantizaba el derecho al aborto a nivel federal, ha lamentado ahora que los republicanos “hablan de forma poco articulada” sobre el aborto.
En este sentido, ha señalado que políticos como Ron DeSantis han “perseguido restricciones terribles” a nivel estatal, algo que podría llegar a “alienar a gran parte de la población”, pero ha evitado adoptar una postura concreta.
No obstante, en una entrevista con al cadena de televisión NBC, Trump ha asegurado que si es elegido, tratará de llegar a acuerdos sobre los plazos legales para abordar y estudiará si estas medidas deben tomarse a nivel federal. “Me sentaría con ambas partes y negociaría algo, y acabaríamos con paz en ese tema por primera vez en 52 años”, ha aseverado.
Contrastes
Trump ha arremetido así contra la legislación de Florida, donde el aborto está prohibido a partir de la sexta semana de embarazo.
El equipo de DeSantis, por su parte, ha recalcado que durante la Administración Trump se obtuvieron “resultados desastrosos”. “Más de 7.000 millones de dólares en una nueva deuda, un muro fronterizo inacabado y una ley que permite a los criminales violentos volver a las calles. Los republicanos de todo el país saben que Ron DeSantis nunca dará marcha atrás”, ha indicado el portavoz Andrew Romeo.
Trump ha advertido a los republicanos que el partido perderá votantes si sigue adelante con las restricciones al aborto sin excepciones e incluso en casos de violación, incesto o riesgo para la vida de la madre. “En ciertas partes del país no podéis ni vais a ganar en este tema”, ha dicho.
La importancia del aborto
El aborto también podría ser un tema crucial este otoño en las elecciones legislativas del estado de Virginia, que se consideran un barómetro del estado de ánimo del electorado de cara a las elecciones presidenciales del próximo año.
El nombramiento por Trump de tres jueces conservadores del Tribunal Supremo allanó el camino a la revocación de la decisión de 1973, que garantizaba el derecho al aborto en todo Estados Unidos durante las primeras 24 semanas de embarazo. Esa revocación dejó el derecho al aborto en manos de los estados, lo que ha dado lugar a diferentes leyes, incluida la prohibición del aborto después de la sexta semana de embarazo en Florida y en Iowa.
El derecho al aborto ha sido una de las principales líneas de fractura en el marco de la campaña para las primarias republicanas de 2024. El exvicepresidente estadounidense Mike Pence ha abogado por una prohibición federal del aborto después de las 15 semanas. DeSantis, el rival de Trump que más apoyos recibe, según las encuestas, ha mostrado su apoyo a la legislación de Florida.
Sin embargo, otros aspirantes, entre ellos Nikki Haley, han adoptado enfoques más moderados, advirtiendo de la reacción que podrían suscitar estas medidas entre sus votantes, en caso de que se adopten legislaciones más estrictas.
Aunque Trump ha preferido ponerse de lado y no concretar si apoyaría una prohibición a nivel federal o una cuestión descentralizada a nivel estatal, ha asegurado que “se llegará a un acuerdo de semanas o meses, un acuerdo que va a hacer feliz a la gente”.
“Desde un punto de vista puro, desde un punto de vista legal, creo que probablemente sea mejor (dejarlo en manos de los estados). Pero puedo vivir con ello de cualquier manera”, ha puntualizado antes de insistir en que “podría ser estatal o podría ser federal, francamente no me importa”.
*Con información de Europa Press.