Nada parece ser suficiente para derrumbar el apoyo que buena parte de los estadounidenses le están dando al expresidente Donald Trump. Tiene investigaciones por su papel en el asalto al Capitolio, un presunto fraude fiscal, mal manejo de documentos confidenciales, intentos de revertir resultados de elecciones y hasta la evasión de impuestos, y todo parece que le resbala hoy día.
El líder republicano quiere volver a la presidencia en las elecciones del 2024, y si bien no la tiene nada fácil, ha ido revirtiendo el panorama y parece ir consolidando su favoritismo de cara a los comicios. El primer gran obstáculo lo tiene en su propio partido, porque la figura del gobernador de La Florida, Ron DeSantis, es muy popular, pero según el último sondeo de Morning Consult, Trump lo supera en intención de voto por 17 puntos.
El siguiente obstáculo que enfrenta el antiguo mandatario sería un segundo round contra su mayor rival, el presidente Joe Biden, quien también ha manifestado su intención de buscar la reelección, pero hoy parece difícil, según los más recientes sondeos. Si las elecciones fueran hoy, el republicano superaría a su contrincante por tres puntos, según una encuesta del Emerson College.
La clave de Trump para volver a ser trascendente y popular en la escena política del país es pintar un panorama casi apocalíptico de lo que ha sido el mandato de Joe Biden para así poner la pasarela e intentar una vuelta a la Casa Blanca. “La historia está lejos de haber concluido y nos preparamos para un regreso increíble, no tenemos otra opción”, dijo hace poco en un discurso.
Dentro de las filas de su partido, parece haber división sobre qué debe pasar en el futuro, ya que si bien hay muchos políticos republicanos que aún pregonan junto a Trump, también hay voces que apoyan a otros candidatos como el gobernador DeSantis, el exvicepresidente Mike Pence o el senador Tim Scott. Pero dada la popularidad creciente del exmandatario, no parece que nadie se pueda, por ahora, interponer en su camino.
Pero la preparación para las elecciones no es el único camino en que Trump está remontando. Una de sus llaves para abrir la puerta al éxito en un par de años será el otro ring: el de las redes sociales. Esta semana, el magnate recibió la noticia de que podrá volver tanto a Instagram como a Facebook después de una larga suspensión de más de dos años tras compartir información falsa durante el ataque al Capitolio.
“El público debería poder escuchar lo que dicen sus políticos, lo bueno, lo malo y lo feo, para que puedan tomar decisiones informadas en las urnas”, manifestó Meta en un comunicado. La gigante tecnológica aclaró que, de igual manera, el exmandatario tiene que acogerse a las normas comunitarias en la red social. Esta noticia llega después de que Elon Musk anunciara el restablecimiento de su cuenta de Twitter, aunque aún no la ha vuelto a usar. Con esto, el exmandatario podrá comunicarse con sus más de 87 millones de seguidores en Twitter, 34 millones en Facebook y 23 millones en Instagram, otra victoria para el republicano.
Al día de hoy, el panorama para el futuro de los Estados Unidos es que Donald Trump estaría más cerca de volver a la presidencia de lo que parecía hace unos pocos meses. Ahora la tarea del gobierno de Biden es intentar convencer a sus detractores, mientras que el republicano tendrá que seguir por la senda que ha ido recorriendo durante el último tiempo y esperar que ninguno de los problemas judiciales que lo han asfixiado logre interponerse en su camino.