Donald Trump, el ahora mismo favorito indiscutible a la nominación republicana a la Casa Blanca, aventaja al presidente Joe Biden en todos los estados indecisos del país, según una encuesta de Morning Consult/Bloomberg publicada a once meses de los comicios presidenciales de 2024.
Trump ganaría ahora mismo en Arizona, Georgia, Míchigan, Nevada, Carolina del Norte y Wisconsin, los siete estados llamados “swing states” que no dominan ni republicanos ni demócratas y son absolutamente imprescindibles para decantar el resultado electoral.
Biden ha perdido el punto porcentual de ventaja que tenía el mes pasado sobre Trump en el estado de Míchigan y ahora el magnate neoyorquino y expresidente le saca allí cuatro puntos porcentuales de diferencia, que se suman a los tres que le saca en Arizona, los siete que le saca en Georgia, los once en Carolina del Norte, los seis en Wisconsin, los cinco en Nevada y el punto que le saca en Pensilvania.
Con excepción de Georgia y Carolina del Norte, estos resultados entran dentro del margen de error previsto por la encuestadora para cada estado.
En términos generales, un 58 % de los votantes de estos siete estados mantienen una opinión desfavorable de Biden por un 53 % sobre Trump, a quien consideran como más capacitado para gestionar la economía nacional.
Por lo que se refiere a los aspectos más concretos del sondeo, la encuesta destaca por encima de todo el descenso de la intención de voto para Biden del electorado negro y en el llamado “voto joven” de entre 18 y 34 años. En este último segmento, Trump ya saca a Biden cinco puntos de ventaja (45 % a 40 %). En el voto negro, el porcentaje de apoyo a Biden ha bajado desde octubre del 46 al 38 %, frente al 24 % a favor de Trump.
Congreso de EE. UU. abre formalmente investigación sobre posible destitución de Biden
El Congreso de Estados Unidos aprobó este miércoles la apertura formal de una investigación sobre una eventual destitución del presidente Joe Biden por los turbios negocios de su hijo en el extranjero, una iniciativa que el presidente calificó de “artimaña política infundada”.
Este procedimiento no tiene prácticamente posibilidades de éxito, pero es un estorbo para la Casa Blanca antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2024, en las que Biden busca ser reelegido.
Los conservadores, que tienen la mayoría en la Cámara de Representantes desde enero, acusan al líder demócrata de haber utilizado su influencia cuando era vicepresidente de Barack Obama (2009-2017) para permitir a su hijo Hunter realizar negocios en China y Ucrania.
“Joe Biden mintió repetidamente al pueblo estadounidense”, acusó el jefe del comité de investigación de la Cámara de Representantes, James Comer. El presidente, su hijo y el Partido Demócrata en general niegan las acusaciones.
“En vez de hacer su trabajo (...) deciden perder el tiempo con esta artimaña política infundada que incluso los republicanos en el Congreso reconocen que no está respaldada por hechos”, reaccionó Biden en un comunicado minutos después de la votación.
Unas horas antes, su hijo Hunter dio una inusual rueda de prensa en la que defendió a su progenitor.
“Permítanme decirlo lo más claramente posible: mi padre no participó financieramente en mis negocios”, aseguró Hunter, que se ha convertido en el blanco predilecto de los conservadores.
Delante del Congreso Hunter reconoció “haber cometido errores” en su vida, pero acusó a “los trumpistas”, es decir, a los partidarios del expresidente republicano Donald Trump, de intentar “deshumanizarlo” para “perjudicar” a su padre.
Por eso se negó a acudir a una sesión a puerta cerrada organizada por los republicanos, que querían que compareciera ante el Congreso.
El presidente de 81 años siempre ha apoyado públicamente a Hunter Biden y ha dicho en muchas ocasiones que se siente “orgulloso” de él.
*Con información de Europa Press y la AFP.