Las fuertes lluvias en Chile, en medio del fenómeno de El Niño, ya dejan dos fallecidos. Según confirmó el presidente chileno, Gabriel Boric, explicando que las víctimas murieron luego de ser aplastadas tras la caída de árboles, además de más de 400 afectados por las inundaciones.
“Desgraciadamente tenemos dos personas que han fallecido producto de caídas de árboles, (...) además de tres personas desaparecidas, 419 damnificados, 1.002 albergados, 2.759 personas aisladas y cortes de aguas en varias comunas (municipios) de la región de Valparaíso”, añadió Boric en unas declaraciones recogidas por el medio Cooperativa. Entre los desaparecidos, hay un bombero que ayudaba en tareas de socorro.
La primera víctima es una mujer que circulaba en un vehículo particular por el sur de la capital del país, Santiago de Chile, y falleció tras la caída de un árbol “de grandes dimensiones”, según han informado los Carabineros. Mientras que, el segundo accidente ha ocurrido en la ciudad Concepción, según ha informado la teniente de la 1ª Comisaría de esta ciudad, Vanesa Romero.
“Carabineros se constituyen en este lugar para verificar el fallecimiento de una persona a raíz de la caída de un árbol, el que producto de las condiciones climáticas se desprende y le cae en la cabeza, ocasionándole la muerte en el lugar de forma instantánea”, explicó Romero.
“Hemos visto escenas dramáticas de rescates en donde gente valiente, ya sean funcionarios de Carabineros, de las Fuerzas Armadas, de Bomberos o vecinos y vecinas se están jugando la vida, por lo que quiero pedirle a toda la población que seamos responsables, y que ante las declaraciones de evacuación se haga caso a la primera”, pidió Boric.
El mandatario también ha remarcado que “si tomamos la determinación en conjunto con las autoridades locales de que se evacúe una zona, es porque es estrictamente necesario, y en estos casos vale más prevenir que lamentar”.
Tras visitar a familias damnificadas en el municipio de Talagante, a 40 km al oeste de Santiago, el presidente chileno afirmó la noche del sábado que existe una situación “muy delicada” en cuatro regiones al sur de la capital.
“Acabo de visitar familias del sector La Manresa de Talagante para ver en terreno los efectos de esta emergencia. Como Gobierno seguimos desplegados y trabajando por las y los chilenos afectados. Mañana estaremos en diversas zonas del país para asegurar que las ayudas lleguen donde se necesitan. No los dejaremos solos!”, agregó el presidente en sus redes sociales.
En vista de este escenario, el gobierno decretó zona de catástrofe en toda la zona central, desde la región de Valparaíso por el norte hasta la del Biobío por el sur, lo que permite asignar recursos especiales por los destrozos en la infraestructura y las viviendas destruidas.
Las intensas lluvias, que comenzaron el jueves, se concentraron en muy pocas horas en lugares de la cordillera y la precordillera, donde habitualmente cae nieve. Esto provocó un rápido aumento de los caudales de los ríos, incluidos el Mapocho y el Maipo, que cruzan Santiago.
El jueves se reportó que el estimado de afectados por cortes de electricidad llegaba a los 58.000, obligando a las empresas prestadoras del servicio a implementar planes de contingencia para resolver con premura los fallos derivados de las lluvias.
Además del problema de los apagones y el empozamiento de agua en los deprimidos, uno de los grandes retos para las autoridades locales de Santiago ha derivado del desbordamiento de canales de agua, situación que derivó del aumento de las lluvias y la acumulación de basuras.
La situación también representó una reducción en la velocidad de las vías cercanas a los canales desbordados, y el despliegue de grupos de expertos que trabajan en encauzar las aguas y en la limpieza de los canales debido al riesgo sanitario que ello conlleva.
*Con información de Europa Press y AFP.