El revés parlamentario del paquete de reformas del presidente argentino Javier Milei, tras el retiro del apoyo de diputados aliados, suma incertidumbre respecto a la gobernabilidad y empuja a Argentina a una nueva crisis socioeconómica, según analistas.
La ley de reformas que ambicionaba el presidente ultraderechista ya había sido diezmada cuando Milei retiró el capítulo fiscal y decenas de artículos en pos de lograr la aprobación en general en la Cámara de Diputados. Pero a pesar de eso no pudo evitar el naufragio el martes en el debate por artículos y todo volvió a foja cero en una situación parlamentaria inédita.
“Milei se jugó a no negociar, hubo impericia parlamentaria, pero también una decisión política porque tiene un profundo desprecio por la negociación y el acuerdo político. De esta forma no puede gobernar”, dijo a la AFP Sergio Morresi, investigador y doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de San Pablo.
Otro paquete de reformas y desregulaciones económicas impuesto por un megadecreto que rige desde el 30 de diciembre pasado está bajo análisis de la Justicia, que ya declaró inconstitucional la parte laboral y analiza decenas de pedidos de suspensión del resto, en un camino que puede llegar a la Corte Suprema.
Desde Israel, donde se encuentra de gira, Milei se refirió a los diputados como un “conjunto de delincuentes” y los acusó de “descuartizar” la ley. Por eso “di la orden de levantar el proyecto”, afirmó en rueda de prensa.
¿Decreto o plebiscito?
El fracaso legislativo y las objeciones legales al megadecreto exponen la debilidad política del presidente y encienden una alerta respecto a la gobernabilidad, consideró Morresi. “Esto lleva a un estancamiento político y a una situación muy delicada”, advirtió. “Milei había dicho que iba a imponer sus leyes y si no salían, irían por decreto o llamaría a plebiscito. Pero el decreto tiene límites constitucionales y la consulta popular no es vinculante”, explicó.
Si decide llamar a un plebiscito y lo gana “puede forzar el apoyo del Congreso; si lo pierde, es un gobierno en crisis absoluta”, advirtió. Consultado al respecto, el vocero presidencial Manuel Adorni dijo este miércoles que tanto un decreto como un plebiscito “se están evaluando”. “Mientras tanto, el camino económico sigue como si nada hubiera pasado”, aseguró.
La incertidumbre en una sociedad con la mecha corta agobiada por la inflación que no cede (211 % en 2023) “no deja margen”, advirtió el politólogo Rosengo Fraga. “La pobreza está en más del 50 % y el 63 % de los chicos están mal alimentados, esta es la realidad que le pone un límite” a la discusión política, dijo.
Para el economista Pablo Tigani, Milei “sufrió una derrota muy fuerte” y por eso la gobernabilidad “es clave”. “Va a tener muchos problemas si pretende gobernar como una tiranía. Va a tener que ser flexible porque la política es negociación y estrategias”, indicó.
Todopoderoso
El ministro del Interior, Guillemo Francos, se pronunció este miércoles a favor de la búsqueda de consensos “para avanzar en las modificaciones que el presidente pretende”, en un intento por reconstruir puentes con el Parlamento. “No hay que dinamitar nada (...) hay que buscar un camino de encuentro para destrabar esto en el Congreso”, expresó.
El revés cayó por sorpresa en el oficialismo “por una sensación todopoderosa de creer que las cosas se iban a imponer por la voluntad de Milei”, señaló el politólogo y analista económico del Centro de Economía Política Argentina (Cepa), Martín Epstein.
“Los mercados están mirando con recelo porque hay un gran interrogante respecto a si van a volver a discutir la ley en el Congreso o la van a retirar directamente”, dijo. La incertidumbre “puede empeorar si el Congreso decide rechazar el decreto y, visto lo que sucedió con la ley, puede suceder”, agregó.
En opinión del analista y politólogo Artemio López, las condiciones del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional por una deuda por 44.000 millones de dólares contraída en 2018 por el expresidente Mauricio Macri también influyen.
“El modelo socioeconómico tutelado por el FMI y los cambios legislativos que implican hacen muy difícil que obtengan legitimidad parlamentaria”, señaló López al recordar que el oficialismo tiene 38 de 252 diputados y 7 de los 72 senadores, por lo que en ambas cámaras depende de sus aliados.
“Solo estamos seguros de que el ajuste brutal de los ingresos familiares que está llevando a cabo a velocidad inédita causará gran angustia y dolor en la sociedad”, afirmó.
Según sus cálculos, la velocidad del ajuste económico “llevará la pobreza a 55 % en junio, los mismos niveles que dejó la tan conocida a nivel mundial ‘crisis de 2001′. En fin, una nueva catástrofe económica se avecina en Argentina”, concluyó.
*Con información de la AFP.