El Gobierno ecuatoriano se pronunció ante la acusación de China de que el coronavirus se habría detectado en envases de camarones provenientes del país latinoamericano, en medio de la preocupación del gigante asiático por la seguridad alimentaria desde que se registrara un rebrote de la pandemia en un mercado mayorista al sur de Pekín. "Apoyamos a nuestros exportadores de camarón con protocolos de inocuidad y bioseguridad reconocidos por el Gobierno chino", escribió en Twitter el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, quien además aseguró que le envió una carta al presidente Xi Jinping "para encontrar soluciones conjuntas, normalizar la situación y mantener nuestro prestigio internacional en ese mercado".
Cabe mencionar que la Administración de Aduanas china ha estado realizando pruebas a varios productos alimenticios y sus embalajes, además de llevar a cabo una estricta revisión a las importaciones de productos congelados.En esta oportunidad, en los puertos chinos de Dalián (noreste) y Xiamen (este) se encontraron los paquetes de camarones blancos del Pacífico que dieron positivo de coronavirus.No obstante, Bi Kexin, portavoz de las aduanas, indicó frente a la prensa de ese país que no porque se haya encontrado el virus en los paquetes de camarones no significa necesariamente que este alimento sea contagioso.
Entretanto, el Gobierno ecuatoriano ha sido enfático en que "la notificación de la Aduana de China no constituye una sanción al país, ni al camarón ecuatoriano en particular" y defendió que siempre se cumple con los protocolos de bioseguridad tanto de la regulación nacional como de estándares internacionales.Además, señaló que incluso en medio de la emergencia sanitaria por la pandemia de la covid-19 que se vive alrededor en varios países, "se han mantenido los envíos desde nuestro país hacia los diferentes mercados alrededor del mundo". Ecuador es uno de los países latinoamericanos más golpeados por la enfermedad: registra 67.870 contagios y 5.047 fallecimientos.
Una situación similar se presentó con Noruega y la acusación de que el coronavirus se habría detectado en una tabla de cortar utilizada para manipular salmón importado, el cual generó un rebrote de la pandemia entre trabajadores y visitantes del principal mercado de Pekín, en Xinfadi, al suroeste de la capital china.Noruega también salió a defenderse e indicó que su salmón no fue la causa del rebrote de la covid-19 en Pekín, además de recordar que ese producto es uno de sus estandartes, casi como un símbolo nacional, y que al año exportan millones de toneladas a varios países del mundo. De hecho, en 2019 China consumió alrededor de 23.500 toneladas de salmón noruego.