El secretario de Estado de EE.UU, Antony Blinken, aseguró en las últimas horas que Estados Unidos aspira a lograr una “verdadera asociación” con África y no trata de “sobrepasar” a otras potencias mundiales en la influencia en el continente, esto en el marco de su segundo día de gira africana.
“Nuestro compromiso con África es una verdadera colaboración, no se trata de adelantar a nadie más”, declaró Blinken en una rueda de prensa junto a su homólogo sudafricano, Naledi Pandor. El alto funcionario del gobierno norteamericano enfatizó en que no se busca tener una relación desequilibrada y transaccional.
Llegado el día anterior a Sudáfrica, primera etapa de una gira que luego lo llevará a República Democrática del Congo y Ruanda hasta el jueves, Blinken desarrollará su visión estratégica para el continente por la tarde durante un discurso en la Universidad de Pretoria.
Esta visita tiene como objetivo tratar de acercar la diplomacia sudafricana al campo occidental y frustrar la influencia rusa en el continente, según varios expertos.
Llega justo después de la visita a África, a finales de julio, de su homólogo ruso Serguéi Lavrov, que estuvo en Congo, Uganda, Egipto y Etiopía.
En junio, el presidente de Rusia Vladimir Putin instó a los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) a cooperar frente a lo que calificó como “acciones egoístas” de Occidente.
El lunes, Blinken afirmó que Washington no veía a la región como “el último terreno de juego en la competencia entre grandes potencias”. “Básicamente, no es así como lo vemos. No es así como avanzaremos en nuestro compromiso aquí”, insistió.
El Secretario de Estado estadounidense, inició este domingo una gira por África para contrarrestar la influencia diplomática rusa con una primera parada en Sudáfrica, donde rindió homenaje a la revuelta estudiantil anti-apartheid de Soweto.
Con este viaje por tres países africanos, Washington intensifica la diplomacia para contrarrestar el peso de Rusia en el continente, poco después de una extensa gira por África del ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
Sudáfrica ha mantenido una posición neutra desde el inicio de la guerra en Ucrania, rechazando unirse a las condenas occidentales contra Rusia.
El domingo, Blinken recorrió el distrito de Soweto, corazón de la lucha contra la segregación racial en Sudáfrica, y visitó el Museo Hector Pieterson, construido en memoria de los estudiantes asesinados en una protesta de 1976, que se convirtió en uno de los hitos del movimiento contra el apartheid.
“Lo extraordinario de este museo es que es historia viva porque inspira a la gente a ver el poder que los jóvenes pueden tener para generar cambios”, dijo tras la visita.
Para Fonteh Akum, director del Instituto de Estudios de Seguridad con sede en Pretoria, la visita de Blinken pretende “acercar a Sudáfrica al campo occidental”.
El presidente francés, Emmanuel Macron, visitó Benín, Camerún y Guinea-Bissau a fines del mes pasado, mientras que Lavrov estuvo en Congo-Brazzaville, Egipto, Etiopía y Uganda.
Que Blinken venga después de Lavrov y Macron, “básicamente muestra que África está entrando en una fase en la que hay otra competencia de grandes potencias en el continente”, dijo Akum.
Este es el segundo viaje del Secretario de Estado estadounidense a África desde su nombramiento el año pasado. En su primer viaje estuvo en Kenia, Nigeria y Senegal. Ahora, después de Sudáfrica, se dirigirá a finales de semana a la República Democrática del Congo y posteriormente a Ruanda.
Antes de la invasión rusa a Ucrania, la diplomacia estadounidense en África se centraba principalmente en la competencia con China, que ha realizado importantes inversiones en infraestructuras en el continente sin exigir ninguna contrapartida a los Estados en materia de democracia o derechos humanos.
*Con información de AFP.