El gobierno de Estados Unidos dijo el martes que evalúa más sanciones contra el nuevo gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua, a quien llamó “autócrata represivo”, y afirmó que reanudar la relación con China profundiza el “autoritarismo” en el país centroamericano.

Emily Mendrala, subsecretaria de Estado adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental, dijo que Estados Unidos “usará todas las herramientas diplomáticas y económicas a su alcance” para “promover la rendición de cuentas del gobierno” de Ortega y “quienes facilitan los abusos que se cometen”.

“Estamos estudiando las opciones que tenemos”, señaló, incluida una revisión de la participación de Nicaragua en el pacto de libre comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (CAFTA-DR).

Ortega, en el poder desde 2007, asumió el lunes un cuarto mandato consecutivo, el segundo junto a su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, al tiempo que Estados Unidos y la Unión Europea endurecieron las sanciones contra el entorno presidencial y altos funcionarios.

Mendrala tildó de “simulacro” las elecciones del 7 de noviembre, que se celebraron con los principales opositores presos o en el exilio y toda disidencia silenciada, y sin observaciones internacionales independientes.

“Estamos enfocados en el restablecimiento de la democracia en Nicaragua. La liberación de (opositores) presos sería un primer paso concreto”, aseveró.

Posesión de Daniel Ortega, en un quinto mandado como presidente de Nicaragua. | Foto: Twitter: @NicolasMaduro

Más de 40 críticos del gobierno fueron detenidos en Nicaragua entre junio y diciembre de 2021, incluidos siete potenciales rivales electorales de Ortega. A este grupo se suman otras 120 personas encarceladas por participar en las protestas antigubermantales de 2018.

“La familia Ortega Murillo, que perdió el apoyo popular hace tiempo y ya no tiene mandato democrático, ahora gobierna Nicaragua como autócratas represivos y eso hace que no se diferencien de la familia Somoza, a la que Ortega y los sandinistas combatieron hace cuatro décadas”, afirmó Mendrala.

Ortega gobernó Nicaragua de 1979 a 1990, tras liderar una guerrilla que derrocó al dictador Anastasio Somoza respaldado por Estados Unidos.

Tras su retorno a la presidencia en 2007 ganó la reelección tres veces, anulando cada vez más los límites del mandato presidencial.

Estados Unidos también cuestionó la reanudación de las relaciones de Managua con Pekín, que el gobierno de Ortega anunció en diciembre tras deshacer los nexos de más de 30 años con Taiwán y reconocer el principio de “una sola China”.

“Fortalecer las relaciones con la República Popular China precipita incluso más a Nicaragua al autoritarismo”, dijo Mendrala.

La decisión, a la que siguió la donación de miles de vacunas anticovid chinas a Managua, llega en un momento de creciente tensión entre China y Estados Unidos por Taiwán, la isla gobernada democráticamente que Pekín considera como parte de su territorio.

Ortega estableció relaciones con China en 1985, durante su primer gobierno, pero fueron suspendidas cinco años después por su sucesora, Violeta Chamorro, quien a su vez estableció lazos con Taiwán.

*Con información de la AFP.