Estados Unidos y China chocaron este miércoles en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre cómo reducir las tensiones con Corea del Norte. Mientras Washington pide más sanciones contra Pyongyang, Pekín pide reducirlas.

La reunión de emergencia del consejo se dio después de los temores de que Corea del Norte reactive sus ensayos nucleares en las próximas semanas.

“Es hora de detener la idea de permisividad tácita y comenzar a emprender acciones”, dijo la embajadora estadounidense para la ONU, Linda Thomas-Greenfield.

“Necesitamos movernos rápidamente hacia el endurecimiento de las sanciones, sin considerar atenuarlas”, añadió.

Thomas-Greenfield rechazó el borrador de resolución de China y Rusia, que como Estados Unidos también son miembros del Consejo con poder de veto, que apuntaba a aliviar las sanciones impuestas en 2017.

La embajadora dijo que estaban cerca del final de las negociaciones de un texto separado de Estados Unidos que actualiza las sanciones.

“No podemos esperar hasta que (Corea del Norte) emprenda más actos provocativos, ilegales y peligrosos como ensayos nucleares. Necesitamos manifestarnos”, dijo.

El embajador de China en la ONU Zhang Jun calificó como “preocupante” la posibilidad de una escalada y pidió “moderación”. Agregó que endurecer las sanciones en una atmósfera de desconfianza “no sería constructivo”.

“Lo que quiere China es evitar un nuevo ensayo nuclear”, dijo a la AFP luego de la reunión.

“Conversar es mejor que las medidas coercitivas. Hemos visto muchas medidas coercitivas en el mundo, en Siria, Irak y Afganistán. ¿Han visto buenos resultados? Lo que hemos visto es solamente sufrimiento humanitario”, explicó.

La embajadora encargada de Rusia, Anna Yevstigneeva, también defendió la resolución que propuso junto a China e hizo un llamado para la reanudación del diálogo.

Pyongyang ha aumentado las pruebas de misiles, incluyendo el lanzamiento de un misil balístico intercontinental de amplio alcance, por primera vez desde 2017.

Imágenes satelitales muestran que Corea del Norte también puede estar preparándose para reanudar las ensayos nucleares, y el Departamento de Estado de Estados Unidos advirtió la semana pasada que una prueba podría realizarse “tan pronto como este mismo mes”.

Nuevo presidente de Corea del Sur pide la “desnuclearización completa” de Corea del Norte

Tras los recientes cambios en la política de la península coreana, el nuevo presidente de la nación del sur, Yoon Suk-yeol, continuó con su radical discurso contra Pyongyang en medio de su primer discurso oficial, mientras se juraba como mandatario de los surcoreanos al frente de la Asamblea Nacional de Seúl.

Tras cinco años en los que el antecesor de Suk-yeol trató de mantener una relación amistosa con sus vecinos del norte, los surcoreanos votaron por un nuevo representante conservador que, aunque está dispuesto al diálogo con Kim Jong-un, actual líder supremo de Corea del Norte, también se ha mostrado radical y con la intención de ser “severo” ante las provocaciones de Pyongyang.

La entrada al poder de Suk-yeol quedó marcada con una contundente petición para el territorio del norte, ya que no tuvo reparo en pedir la “desnuclearización completa” de Corea del Norte. El nuevo presidente surcoreano argumentó su petición, afirmando que este tipo de armamento en manos de Kim Jong-un es una amenaza para la seguridad global.

Yoon Suk-yeol, del principal opositor Partido del Poder Popular, hace gestos a sus seguidores durante un mitin de campaña electoral en Seúl el 8 de marzo de 2022, antes de las elecciones presidenciales del 9 de marzo. (Photo by HONG Yoon-gi / AFP) | Foto: AFP or licensors

Aunque la petición no se quedó solo en el desarme, el mandatario de Corea del Sur también ofreció su ayuda para promover la economía norcoreana, si Pyonyang “se embarca genuinamente en un proceso para la desnuclearización completa”. Por lo que aseguró que si estos aceptan su trato, entonces desde Seúl se prepararía “un plan audaz” que tendría como objetivo reimpulsar la empobrecida economía de Corea del Norte.

Es de recordar que en el último discurso de Moon Jae-in, quien es el presidente saliente de Sur Corea, este pidió que se continuara con los intentos de diálogo con los vecinos del norte de la península. “La paz es un requisito para nuestra supervivencia, un requisito de prosperidad... Espero sinceramente que los esfuerzos para la desnuclearización y la institucionalización de la paz sigan adelante con la reanudación del diálogo entre el Sur y el Norte”, fueron las palabras de Moon, mientras se despedía de su cargo pidiendo también por el desarme nuclear de Pyonyang.

*Con información de la AFP.