Estados Unidos ha conseguido que 3.200 personas abandonen Afganistán desde que los talibanes se hicieron con el poder.

Un funcionario de la Casa Blanca confirmó a la CNN esta cifra así como que 1.100 ciudadanos estadounidenses y sus familias, que eran residentes permanentes, han sido evacuados en 13 vuelos durante las últimas 24 horas.

El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, reconoció este martes que Estados Unidos se siente “preocupado” por las informaciones que han llegado denunciando prácticas abusivas y agresiones llevadas a cabo por los talibanes en los puestos de control que habrían levantado en los accesos al aeropuerto.

“Hemos recibido información de personas que han sido rechazadas e incluso golpeadas” en su camino al aeropuerto. “Lo estamos abordando directamente con los talibanes para tratar de resolver este problema”, dijo Sullivan, que explica que están centrados en hacer que todos suban a los aviones y los talibanes “cumplan con su compromiso” de permitir estas evacuaciones.

Estos comentarios han sido cuestionados y, horas después, aclaró en su cuenta de Twitter que, cuando le preguntaron “si iban a ser evacuados todos los estadounidenses de Afganistán”, se refería a que “eso mismo es lo que se pretende hacer” y “eso es exactamente lo que se hará”. En este sentido, indicó que “ahora mismo” se está “logrando con la reapertura y funcionamiento del aeropuerto de Kabul”, gracias al “trabajo de nuestras tropas y diplomáticos”.

Más temprano, el Gobierno informó que unos 11.000 estadounidenses permanecían en Afganistán, incluidos diplomáticos, contratistas y otras personas, según la Casa Blanca.

Washington quiere completar las evacuaciones antes de la fecha límite de retirada fijada por el presidente Joe Biden el 31 de agosto. Miles de soldados estadounidenses estaban en el aeropuerto de Kabul para apoyar estos esfuerzos, mientras el Pentágono planeaba aumentar los vuelos de sus aviones de transporte C-17 hasta a 24 al día.

Funcionarios estadounidenses dijeron que estaban en contacto con comandantes talibanes para garantizar que las operaciones en el aeropuerto internacional Hamid Karzai fueran seguras.

El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, señaló por otra parte que Estados Unidos podría decidir mantener su presencia diplomática en Afganistán, que ahora opera fuera del aeropuerto después del cierre de la embajada, más allá del 31 de agosto.

“Si es seguro y responsable para nosotros potencialmente quedarnos más tiempo, eso es algo que podemos considerar”, dijo.

Los talibanes tomaron el control de Afganistán el domingo, cuando el presidente Ashraf Ghani huyó y los insurgentes entraron en Kabul sin oposición.

El colapso se produjo cuando Biden ordenó completar la retirada de las tropas estadounidenses del país, creyendo que el Ejército afgano entrenado por Estados Unidos estaba listo para resistir a los talibanes.

El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, admitió que con la rendición del Gobierno afgano, “una buena parte” del equipamiento militar estadounidense cayó en manos de los islamistas.

Los talibanes difundieron hace dos días un video junto a helicópteros estadounidenses Black Hawk en el aeropuerto de Kandahar.

“Estos Black Hawks no fueron entregados a los talibanes. Fueron entregados a las fuerzas afganas” y esto a pedido de Ghani, precisó Sullivan.

Destacó que Biden decidió responder a esta solicitud, aunque sabía del riesgo de que cayeran en poder talibán.

Entre 5.000 y 9.000 pasajeros diarios

Miles de estadounidenses y de afganos que colaboraron con las fuerzas occidentales en los 20 años de intervención militar liderada por Estados Unidos se aprestaban a salir del país por temor a represalias de los talibanes.

A pesar de algunos informes de acoso e incluso golpes a quienes intentaban irse, Sullivan aseguró que “un gran número” había podido llegar al aeropuerto.

“Los talibanes nos han informado que están dispuestos a apoyar el paso seguro de civiles al aeropuerto, y pretendemos hacer que respeten ese compromiso”, dijo a periodistas.

Un alto funcionario del Estado Mayor Conjunto dijo que los militares estadounidenses en el aeropuerto de Kabul han estado en comunicación con los talibanes para garantizar que la salida continuará de manera segura durante los próximos días.

“No hemos tenido interacciones hostiles, ningún ataque ni amenaza por parte de los talibanes”, informó el general Hank Taylor.

Señaló que desde que el aeropuerto fue reabierto la madrugada del martes luego de cerrar horas por problemas de seguridad, el Ejército estadounidense había evacuado a cerca de 800 personas, entre ellas 165 estadounidenses, en siete vuelos.

Los otros incluyen afganos que recibieron visas de refugiados, principalmente por haber trabajado como traductores para las fuerzas estadounidenses y de la OTAN; otros ciudadanos extranjeros; y otros afganos “en riesgo” no especificados.

Taylor dijo que Estados Unidos se propone transportar entre 5.000 y 9.000 pasajeros diarios.

El Departamento de Defensa ha enviado tropas al aeropuerto desde el sábado y Taylor estimó que el número de soldados estadounidenses aumentaría a unos 4.000 el martes por la noche.

Con información de Europa Press y la AFP.