SEMANA: ¿Cómo ve la situación en estos momentos lo que ocurre en Venezuela?
Mario Díaz Balart: Esta dictadura, primero, trató de tener una elección falsa y después cuando no le salió bien, obviamente las robó, algo que se sabía que iba a pasar. Sabíamos que Maduro no podía ganar una elección y a pesar de que arrestaron a la oposición de antemano y los actos de repudio y de represión contra los líderes de la oposición y el mismo pueblo venezolano, el pueblo se echó a las urnas y votó por la oposición. Lo importante ahora es cómo va a reaccionar el mundo. Es importante que todos los países, las democracias reaccionen de una forma no solamente positiva, agresiva para proteger la democracia, la libertad y las vidas de la oposición en Venezuela.
SEMANA: ¿Usted cree que el gobierno del presidente Joe Biden fue permisivo con el dictador Nicolás Maduro y dejó fortalecer al régimen tratando de negociar con Maduro directamente?
M.D.: Desde el comienzo de la administración de Biden, comenzaron a relajar sanciones unilateralmente para negociar con Maduro y su régimen, algunas veces secretamente, otras veces sí fue publicado por la prensa, pero siempre buscando formas de darle concesiones al intercambio de promesas falsas, algo que le advertimos públicamente y privadamente a la administración de Biden que no lo hiciera. La debilidad de parte de la administración de Biden es parte de la razón, de que el mundo esté en llamas. El mundo no está en llamas por causa de los Estados Unidos, pero cuando no hay liderazgo positivo, serio y fuerte de parte de los Estados Unidos, un mundo que siempre es peligroso se hace mucho más peligroso. No solamente para los pueblos a través del mundo, incluyendo Venezuela, Cuba, Nicaragua, y otras áreas, sino también para la seguridad nacional de los Estados Unidos.
SEMANA: En cuanto a esa reacción que vimos de Antony Blinken y Brian Nichols, ¿usted cree que ese es el conducto regular? ¿Se debe primero aceptar que Edmundo González ganó las elecciones? ¿Qué podría hacer Estados Unidos?
M.D.: Es importante reconocer la realidad de lo que ocurrió en esas elecciones, la oposición ganó, hay un presidente legítimo en Venezuela y no es Maduro, así que eso es un primer paso muy importante. Pero es que los Estados Unidos tienen muchas cosas que puede hacer no solamente para presionar a la dictadura en Venezuela, también para presionar diplomáticamente y económicamente a los que están ayudando y haciendo negocios con esa dictadura que le permite a esa dictadura los fondos, no para que el pueblo de Venezuela coma –porque a la dictadura no le importa que su pueblo se muera de hambre–, utilizan los fondos para reprimir, para pagar a los verdugos que ayudan a reprimir y mantener esa dictadura en el poder.
SEMANA: Junto con la congresista María Elvira Salazar y el congresista Jiménez hablaban de un castigo para los países que no apoyan al pueblo de Venezuela como lo hicieron en la OEA, por ejemplo que se abstuvieron de votar esta importante resolución. ¿De qué manera puede el Congreso de Estados Unidos castigar a estos países?
M.D.: Muy sencillo, hay muchos de ellos que reciben fondos del contribuyente norteamericano. Creo que tiene que haber consecuencias si un país o una entidad de gobierno está tratando de ayudar de una forma u otra, directa o indirectamente a estas dictaduras en nuestro hemisferio, que está reprimiendo a sus pueblos y que le están haciendo daño a la seguridad nacional de los Estados Unidos. Lo más sencillo es que no reciban un centavo del contribuyente de los Estados Unidos, y esto es lo importante, que en el sistema norteamericano los fondos no es la administración, no es el presidente, es el Congreso de los Estados Unidos. Tengo el privilegio y el honor que por el apoyo de mis colegas, presido el subcomité que determina los fondos que van a otros países, a otras entidades extranjeras fuera de los Estados Unidos. Así que creo que van a darse consecuencias muy severas en el futuro para esos países que estén ayudando de una forma u otra a mantener a la dictadura en Venezuela, a la dictadura en Managua y a la dictadura en La Habana.
SEMANA: El presidente Gustavo Petro tardó un par de días en reaccionar a lo que estaba ocurriendo en Venezuela y el embajador encargado se abstuvo en la OEA por orden de él. Y se ha mostrado algo reacio a lo que está ocurriendo, incluyendo los mensajes que le ha respondido a María Corina Machado ¿Usted ha pensado directamente que a Colombia se le debería reducir esa ayuda?
M.D.: El año fiscal 2024 la legislación que ya es ley, les recorta un 10 por ciento de los fondos para Colombia por lo que ha hecho el presidente en los últimos meses de su mandato. También, desafortunadamente, eliminan a Colombia de un grupo élite de países que son los mejores aliados de los Estados Unidos, Colombia ha estado en esa lista por dos décadas y desafortunadamente ya no está en esa lista. Ahora tiene que ir a negociación con el Senado de los Estados Unidos para el año fiscal 2025, hay un posible recorte de un 50 por ciento adicional a los fondos que Colombia, y esto se debe a la actitud y las políticas del presidente Petro, él es el que tiene que determinar si quiere mantener la relación muy especial que ha existido entre los Estados Unidos y Colombia y estas reducciones de fondos hacia Colombia es bipartidista de parte del Congreso de los Estados Unidos.
SEMANA: María Corina Machado está en la clandestinidad en este momento y sigue incrementando esa amenaza contra su vida, ¿qué cree que pueda pasar si el régimen decide capturarla o, incluso, asesinarla como ella misma teme?
M.D.: Ella ha sido una líder excepcional por muchos años de la oposición, es la voz más fuerte de la oposición a Maduro durante mucho tiempo. Yo sé que hay debilidad de parte de la administración de Biden, pero si hay un cambio, y yo creo que hay una gran posibilidad de que haya un cambio de liderazgo en la Casa Blanca después de las elecciones en noviembre, entonces creo que estos que piensan hacerle daño a María Corina Machado y otros, tienen que pensar lo que les ha ocurrido a los enemigos de la libertad y a los enemigos de la democracia cuando estaba el presidente Trump en la Casa Blanca. Pueden haber consecuencias muy severas a cualquier individuo o grupo que le haga daño a ella y a otros de los líderes de la oposición.
SEMANA: ¿Qué cree usted que debería hacer ahora el pueblo venezolano después del robo de las elecciones? ¿Cuál es su mensaje para los que hoy están en la calle pidiendo libertad?
M.D.: Es importante que ese valiente pueblo sepa que no está solo, que el mundo está vigilando lo que está ocurriendo, que los admiramos y no están solos. Pero es importante porque la decisión la tiene que tomar el pueblo de Venezuela, si realmente está dispuesto a hacer lo que tiene que hacer para recuperar su libertad. A través del mundo podemos ayudar, podemos apoyar y podemos de nuevo tener consecuencias muy severas a esos que cometan actos de violencia contra el valiente pueblo de Venezuela, pero tienen que recuperar su libertad y nosotros estamos aquí para ayudarlos en toda forma posible.
SEMANA: ¿Usted cree que se está debilitando cada vez más la relación entre Colombia y Estados Unidos por Gustavo Petro?
M.D.: Sí, es interesante porque yo presido con otro colega un grupo bipartidista, que es el grupo a favor de Colombia. Somos los que hemos luchado y hemos quemado mucho capital político para ayudar a Colombia, ese país tan maravilloso. Y desafortunadamente lo que está haciendo el presidente Petro, no solamente por su actividad y sus relaciones con los peores narcoterroristas a través del mundo, también como está poniendo en peligro en distintas ocasiones el Estado de derecho dentro de Colombia, es lo que está haciendo que la relación entre Colombia y los Estados Unidos no esté al nivel que ha estado por muchas décadas. Eso se debe solamente a la administración del presidente Petro. Eso lo puede revertir él, pero la decisión está en manos del presidente Petro. Veo en la prensa que él dice que la relación entre los Estados Unidos y Colombia nunca ha estado mejor. Desafortunadamente está haciendo mucho daño el presidente Petro a una relación que ha sido muy especial y muy importante para Colombia. Y yo creo que también para los Estados Unidos está en sus manos. Nosotros queremos ayudar a Colombia, pero no podemos ayudar si Colombia insiste en ayudar a los enemigos de los Estados Unidos, a los enemigos de su propio pueblo y hasta haciéndole daño al Estado de derecho dentro de Colombia.