En las elecciones de Brasil, así como los mismos candidatos, sus parejas reflejan el gran contraste entre ambos. Janja, esposa del candidato de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva, de nombre Rosangela, 56 años, es socióloga y militante de izquierda. Su matrimonio es reciente, de apenas este año y dice que quiere darle al rol de la primera dama un nuevo significado. La actual primera dama de Brasil, Michelle Bolsonaro de 40 años, es ahora un elemento clave en la campaña, por sus dotes de oradora.
Michele Bolsonaro es 27 años menor que su esposo, con quien se conoció en el parlamento en 2007 en Brasilia. Él era diputado, ella secretaria. Rosangela dá Silva es veinte años menor que su esposo, quien se enamoró de ella mientras estaba preso, se conocieron dos años antes en un evento con activistas de izquierda. Lula pasó asó 580 días en la cárcel acusado de presuntos delitos de corrupción, la justicia luego anuló la condena alegando fallos en el proceso, lo que le permitió volver de nuevo al ruedo electoral.
Ambas parejas suman electoralmente a sus esposos y realizan son de fácil expresión frente a la multitud. Michelle Bolsonaro ha hecho impactantes apariciones públicas en las que ha hablado en lenguaje de señas como por ejemplo la toma de posesión. Ella ha dicho que dedica parte de su tiempo a las personas con discapacidad, particularmente personas sordas. “Es un llamado que recibí, el de estar cerca de las personas con discapacidad, de los sordos. Tengo mucho amor por esta comunidad” fue lo que explicó durante la campaña que llevó a su esposo a la victoria.
Michelle Bolsonaro es la tercera esposa del presidente desde 2007, Bolsonaro estuvo antes casado y divorciado dos veces antes. Él tiene cuatro hijos anteriores a ese matrimonio y ella una hija anterior a esa unión.
Michelle es una ferviente evangélica y ese carácter aparentemente, le ha dado buen apoyo a su esposo durante estas elecciones. En el lanzamiento de campaña en 2017 por ejemplo, Michelle pronunció una intervención invitando a orar el padre nuestro. A principios de septiembre se unió a varios pastores para llamar a la población a seguir “30 días de ayuno y oración por Brasil” hasta el domingo 2 de octubre, cuando se darán las elecciones en las que el contrincante de su esposo lleva aparentemente una ventaja.
Lula quien también comparte el proyecto político con su tercera esposa, ha quedado viudo dos veces. Primero en 1969 se casó con Maria de Lourdes da Silva, que murió dos años después por una hepatitis. En 1974 contrajo matrimonio con Marisa Leticia con quien vivió hasta 2017 cuando murió de un accidente cerebro vascular, con ella tuvo cuatro hijos.
Janja como se le conoce, con frecuencia toma el micrófono en los actos públicos para defender los derechos de las mujeres , dedicarle palabras de afecto a su esposo o atacar a su contrincante en las urnas. Ideológicamente coincide por completo con su esposo, ha estado Afiliada desde 1983 al Partido de los Trabajadores, PT, cofundado por Lula, y se define a sí misma como una auténtica petista con carné.
Según su propio esposo Janja es una persona muy politizada y feminista. Ella misma dijo en un acto en Río de Janeiro en agosto “Quiero dar un nuevo significado al concepto de primera dama o ‘primera compañera’, enfocándome en temas prioritarios para las mujeres, como la inseguridad alimentaria o la violencia doméstica”
Janja acompaña a Lula a la mayoría de sus compromisos y viajes por el mundo. No da entrevistas y revela muy poco sobre su intimidad. De acuerdo con una revista brasilera estuvo casada antes hace más de 10 años y no tiene hijos. Algunos le han llamado a Janja amuleto, pues justamente el candidato es quien lleva la delantera en las encuestas, para las elecciones de este domingo.