Pero todo lo que pudo salir mal para Fernández tiene su punto más difícil ahora después de que cinco ministros y dos altos funcionarios presentaron su renuncia ante el descontento que se vive en el país. Los titulares de las carteras del Interior, Justicia, Desarrollo Territorial, Ciencia y Ambiente pusieron sus cargos a disposición del presidente. También se sumaron las directoras del servicio de salud de los jubilados (Pami) y de la seguridad social (Anses), las dos oficinas con más presupuesto del Gobierno argentino.
La particularidad de estos ministros y funcionarios es que son allegados a la expresidenta y actual vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, por lo que la situación del Gobierno de Alberto Fernández no es para nada fácil, ya que tendrá que decidir si acepta las renuncias y nombra nuevos ministros más cercanos a él. El ganador con esta inestabilidad es la coalición de derecha Juntos por el Cambio, de la cual hace parte el expresidente Mauricio Macri. Esta alianza fue la gran ganadora de las elecciones primarias y parte como favorita para los comicios presidenciales de 2023.
Frase
“La humanidad no está preparada para una nueva pandemia”
Dijo el fundador de Microsoft, Bill Gates. Según él, la única manera de estar preparados es con el desarrollo masivo y rápido de vacunas. Además, el filántropo enfatizó en los retrocesos que trajo la pandemia en la reducción de la pobreza en el planeta.
Cifra
1.400
Delfines fueron asesinados en Islas Feroe durante una tradicional caza de estos animales. Los realizadores del festival han reconocido que fue un error, ya que pensaban que “solo” iban a cazar alrededor de 200 delfines, lo que ha generado críticas en todo el mundo.
Amenaza permanente
El régimen de Kim Jong-Un, en Corea del Norte, hizo una nueva prueba de un misil de largo alcance. Según el Pentágono, esta tecnología es un progreso para los norcoreanos, que podrían evadir sistemas de defensa, lo que sería un peligro para Corea del Sur y otros países vecinos.
Brasil
Desconectado
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, tuvo un nuevo revés ante la justicia y el Congreso. Esta vez, en un fallido intento del mandatario de facilitar la desinformación al poner trabas a la eliminación de contenidos en redes sociales. El objetivo de Bolsonaro era, según analistas, proteger a las bodegas que publican fake news a su favor en la red y poder ponerles sanciones y multas a redes sociales como Twitter, Facebook o YouTube por censurar algún contenido o perfil.
Las salvedades que quería el mandatario de derecha era que solo por material pornográfico, el terrorismo o el tráfico de drogas se pudiera borrar algo. Ahora, a un año de las elecciones, el presidente deberá lidiar su campaña con información verídica y responder por las acusaciones de coordinar redes de noticias falsas.
Haití
Más preguntas
Después del asesinato del presidente Jovenel Moïse en Haití, el primer ministro Ariel Henry asumió el poder, pero esta semana el fiscal de la nación caribeña pidió investigar al mandatario por su supuesta responsabilidad en el asesinato de Moïse. La respuesta de Henry fue destituirlo del cargo, lo cual plantea más preguntas que respuestas.
Las sospechas de la responsabilidad del primer ministro surgen después del informe revelado por una ONG que cuenta que Henry mantuvo dos conversaciones telefónicas con Joseph Felix Badio, principal sospechoso del magnicidio y quien se encuentra prófugo de la justicia. Por ahora, el primer ministro ha tachado estas acciones de ser una “maniobra de distracción”.
Nicaragua
“Atropello escandaloso”
Así definió el escritor peruano Mario Vargas Llosa a la persecución que ha impuesto el régimen de Daniel Ortega, en Nicaragua, al autor Sergio Ramírez, al que se le dictó una orden de prisión y se le censuró su más reciente libro, Tongolele no sabía bailar. En un encuentro entre ambos autores en el Festival América Cuenta en Madrid, Vargas Llosa pidió que se le aplaudiera a Ramírez para celebrar que no estaba encarcelado, como pretende el régimen de Ortega. “
Estábamos en Costa Rica cuando nos llegó la orden de prisión y de esa manera hemos evitado ser uno de esos 240 presos políticos que hay en Nicaragua”, dijo Ramírez al ser preguntado por qué no fue encarcelado. También, ambos escritores aprovecharon la oportunidad para condenar a Ortega y a su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, a quienes tacharon de ser un régimen dictatorial.