El Ejército de Israe llevó a cabo este viernes, 27 de octubre, una nueva incursión con tanques en la Franja de Gaza, en una operación en la que también han actuado vehículos aéreos no tripulados y helicópteros militares, atacando “decenas de objetivos” del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
“Durante el último día, fuerzas de infantería y blindados, acompañados por drones y helicópteros armados han atacado el centro de la Franja de Gaza”, reza un comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), publicado en su perfil de la red social Twitter.
Así, indicó que, en el marco de la operación, “han atacado decenas de objetivos terroristas, incluidas posiciones de lanzamiento de misiles antitanques y cuarteles generales de operaciones”, así como miembros de la milicia palestina.
“Las fuerzas han abandonado la zona al finalizar la misión y no hay víctimas entre nuestras fuerzas”, han matizado las FDI, que se encuentran realizando incursiones “como parte de preparación” para la invasión del enclave.
Incursión selectiva
En la víspera, las Fuerzas Armadas anunciaron una “incursión selectiva”, que la radio militar calificó de “inusual y extensa” al tratarse de la de “mayor alcance y profundidad” de los últimos días.
Desde el 7 de octubre, Israel ha bombardeado constantemente la Franja, matando a más de 7.000 palestinos, incluidos cerca de 3.000 niños. A esto se suma más de un centenar de muertos por las fuerzas israelíes o colonos en Cisjordania.
El Ejército ha bombardeado a diario este enclave palestino, donde también ha incursionado a la espera de una posible ofensiva terrestre prometida por líderes políticos y militares israelíes.
Los daños que han causado en Gaza las casi tres semanas de bombardeos israelíes quedaban patentes en las imágenes satelitales de varios lugares tomadas antes del conflicto y en los últimos días.
Filas enteras de edificios residenciales han desaparecido en las fotos más recientes, reducidas a manchas de polvo y escombros. Un complejo de 13 rascacielos junto al mar era ahora polvo en las inmediaciones del campo de refugiados al-Shati de la Ciudad de Gaza y solo había algunos trozos de la fachada. Calle abajo, apenas quedaba nada de lo que había sido un barrio de casas bajas y callejuelas sinuosas, según las imágenes tomadas por Maxar Technologies.
Israel sostiene que solo ataca objetivos insurgentes y acusa a Hamás de operar entre la población civil para proteger a sus combatientes. Según Israel, un ataque aéreo mató a uno de los dos autores intelectuales de la masacre del 7 de octubre, Shadi Barud, el jefe de la unidad de inteligencia de la milicia.
El conflicto comenzó con la ofensiva de Hamás en suelo israelí, inédita por su amplitud y su violencia, que dejó más de 1.400 muertos, en su mayoría civiles, según Israel.
Además, Hamás capturó a unas 220 personas, que mantiene como rehenes en la Franja de Gaza, gobernada por el movimiento islamista.
El ministerio de Salud de Hamás anunció por su lado que los bombardeos lanzados por Israel en represalia han matado a más de 7.000 personas, en su gran mayoría civiles.
La guerra en Gaza “desestabilizará toda la región”
El líder del brazo político del grupo terrorista Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), Ismail Haniye, advirtió en un discurso televisado de que la guerra en la Franja de Gaza “desestabilizará toda la región”, en referencia a la posible implicación de otros grupos armados en el conflicto que ampliarían la dimensión del mismo.
“La continuación de la agresión contra Gaza pondrá a toda la región fuera de control (...) La ocupación no podrá recuperarse de la rotunda derrota que sufrió”, declaró según recoge el diario palestino ‘Filastín’, vinculado a Hamás, en referencia al sorpresivo ataque que llevó a cabo el 7 de octubre, que supuso la muerte de cerca de 1.400 personas en territorio israelí.
Haniye remarcó que, después de veinte días “la resistencia (palestina), encabezada por (el brazo armado de Hamás, las Brigadas Ezzedin) al Qassam, continúa sus ataques” y vigila sus fronteras. “En el vigésimo día de esta guerra, afirmamos que la resistencia en Gaza va por el buen camino”, ha aseverado, al tiempo que ha pedido apoyo de los países árabes e islámicos.
No obstante, ha hecho un llamado a sus aliados para hacer presión “en todos los foros para detener la agresión” contra la Franja y ha pedido la apertura de “todos” los cruces fronterizos, “especialmente el de Rafá”, para que se produzca “la entrada de todo lo que Gaza necesita sin restricciones ni condiciones”, al considerar que “es inaceptable” que Israel “controle lo que debería entrar” en el enclave.
*Con información de AP y Europa Press