La claridad a la hora de justificar un viaje a Estados Unidos es fundamental. Una pareja de venezolanos compartió en sus redes sociales su experiencia. Después de varios pasos, a la pareja le fue rechazado el documento, dado que se equivocaron en la forma de llenar un formulario clave, sobre el cual deben proporcionar información verbalmente.
El proceso para ellos inició en 2019 cuando solicitaron la visa por primera vez, pero en 2020 llegó la pandemia y dadas las circunstancias de confinamiento tuvieron que mover la cita para 2021. Una vez llegó el momento atendieron la cita presencial en el centro de servicios, donde les pidieron el formulario DS-160 diligenciado con una vigencia no mayor a un año. Dado que había pasado tanto tiempo desde que iniciaron la solicitud, hasta ese momento, el formulario estaba diligenciado con un período fuera de esa vigencia, pero no tuvieron la precaución de revisar bien que la información estuviera debidamente actualizada.
Una vez volvieron a llenar el formulario, pudieron ir a la toma de huellas. Sin embargo, al día siguiente, cuando tenían la cita consular, el cónsul habló con cada uno de manera individual. La mujer pasó inicialmente y respondió a las preguntas, sin mayor dificultad, y luego fue el turno del joven. A la salida les entregaron los pasaportes a ambos con el papel que aclaraba que la visa había sido negada.
Los jóvenes estuvieron pensando qué habría podido causar ese resultado y llegaron a algunas conclusiones. Primero, como el formulario DS-160 lo habían llenado hacía mucho tiempo, no tuvieron el cuidado de actualizarlo según sus condiciones actuales. Por ejemplo, al momento de llenar el documento inicialmente estaban viviendo en Venezuela, y dado el cambio de cita por la pandemia no tuvieron en cuenta la actualización de la información considerando que ese día de la entrevista consular vivían ya hacía un tiempo en Colombia.
Además, las empresas en las que estaban trabajando eran distintas, por lo que la información tampoco coincidía. Las salidas del país tampoco estaban actualizadas en su formulario, pues inicialmente no habían salido de Venezuela, pero en un segundo momento, ya habían viajado a México.
La explicación que los jóvenes dan al proceso es que el cónsul tiene en su pantalla lo que está escrito en el formulario DS-160, y si al momento de la entrevista esa información no coincide con lo que la persona dice de manera verbal, es altamente probable que nieguen la visa.
Para ambos las preguntas que les hicieron al momento de la entrevista fueron las mismas. Por un lado, qué actividad laboral estaban llevando a cabo, y luego, con quién planeaba viajar a los Estados Unidos.
Un tiempo más tarde la pareja finalmente obtuvo la visa. Fueron mucho mejor preparados al siguiente proceso, con especial atención a no repetir los mismos errores. Además, la cita que sacaron no fue individual, sino como familia, para poder hacer el proceso como núcleo familiar.
¿Existen formas de acelerar la cita para la visa americana?
Sobre la visa americana es importante tener en cuenta que desde Bogotá, la cita para la visa se está demorando cerca de dos años. La ventaja es que la cita se puede reprogramar cuantas veces un usuario lo desee y eso no implica que se pierda la cita inicial ya programada, todas las veces que no se logre establecer una nueva fecha. Así que en esos intentos no hay restricción.
En SEMANA hemos compartido algunos trucos que podrían ayudar a los solicitantes a disminuir los tiempos de espera, aun si en un primer momento la cita asignada la otorgan para 2024, al momento de pedirla en 2022.