Uno de los sueños de muchos viajeros es conocer París, conocida como la Ciudad Luz, que se ha convertido en el sitio turístico más visitado del mundo, con más de 42 millones de visitantes extranjeros por año.

Y es que la capital de Francia le ofrece a los visitantes múltiples alternativas para recorrer y conocer como la Torre Eiffel, la catedral de Notre Dame, los Campos Elíseos, el Arco de Triunfo, la basílica del Sacré Cœur, el Palacio de Los Inválidos, el Panteón, el arco de la Defensa, la ópera Garnier y el barrio de Montmartre, entre otros.

Pero también museos como el Louvre, el Museo de Orsay y el Museo Nacional de Historia Natural de Francia, en fin, una gran oferta en diferentes sectores como la cultura, la gastronomía, la moda y el lujo.

Pero en medio de esa oferta turística y de los otros múltiples lugares por conocer, expertos descubrieron lo que han dado en llamar el Síndrome de París, que es una alteración psicológica extraña, transitoria y repentina que afecta a muchos turistas que visitan la Ciudad Luz.

Los especialistas explicaron que es un trastorno que se caracteriza, especialmente, por síntomas como ansiedad, depresión y alucinaciones, afectando principalmente a viajeros procedentes de Japón.

De hecho, fue descubierto en 1986 y fue descrito, por primera vez, en un artículo de la psiquiatra japonesa Tamami Katada publicado en el medio especializado Journal of the Nissei Hospital, tras analizar el comportamiento que enfrentaron ciudadanos de ese país durante su visita a la capital francesa.

Incluso, la embajada de ese país ha tenido que repatriar a ciudadanos a su país que no podían continuar el viaje por la decepción que sentían.

Algunos profesionales han señalado que podría asimilarse al síndrome de Stendhal, descrito en el año 1990 por la siquiatra italiana, Graziella Margherini.

El síndrome de Stendhal es una enfermedad psicosomática que causa un elevado ritmo cardíaco, vértigo o incluso alucinaciones cuando el individuo es expuesto a una suerte de sobredosis de belleza.

De acuerdo con el estudio, una de las posibles causas de este síndrome es que la persona se crea elevadas expectativas con esa ciudad antes del viaje y al llegar se desilusiona. Pero también se aplica cuando la persona queda impactada por la belleza de París.

La capital de Francia le ofrece a los visitantes múltiples alternativas para recorrer y conocer como la Torre Eiffel, la catedral de Notre Dame, los Campos Elíseos, el Arco de Triunfo, la basílica del Sacré Cœur, el Palacio de Los Inválidos, el Panteón, el arco de la Defensa, la ópera Garnier y el barrio de Montmartre, entre otros. | Foto: Alexander Spatari

En general, el tratamiento de ese síndrome consiste en acompañamiento por parte de un psiquiatra o un psicólogo e incluso, y dependiente de la gravedad, el médico podrá recetar medicamentos antipsicóticos.

Aunque este fenómeno no está reconocido en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, si se trata de una alteración psicológica que requiere de atención por un profesional en salud mental.

¿Cuáles son los síntomas?

Los especialistas han señalado que entre los síntomas se encuentran: inquietud, delirios, ansiedad, despersonalización, agresividad, irritabilidad, aumento de los latidos del corazón y sudoración.

Así mismo, los expertos han detectado casos de depresión y miedo, pero estos varían dependiendo de la persona, aunque podría ser más grave en personas que sufren algún otro trastorno psiquiátrico.

De acuerdo con los estudios, aún no se tiene certeza de las causas de este trastorno, sin embargo, los especialistas consideran entre otras:

- Estrés causado por el choque cultural, específicamente por las diferencias en la comunicación y la socialización.

- Cansancio causado por los viajes y la diferencia de horarios.

- Trastorno mental previo

- Expectativas muy altas en relación al lugar a donde se va a viajar y encontrarse con una realidad completamente diferente.

Tratamiento

Los expertos aconsejan que si una persona presenta los síntomas del Síndrome de París, debe dirigirse a un hospital para ser evaluado por un equipo de salud, donde deberá recibir la intervención de emergencia de acuerdo a los síntomas que presente.

En ese caso, es posible que el médico que lo atienda le formule algún medicamento para mitigar esos síntomas.

Pero aunque haya sido tratado de manera ambulatoria, lo que recomiendan los especialistas es que cuando el viajero regrese a su país de origen, debe buscar de inmediato una cita con un psicólogo o psiquiatra para comprender los motivos que pudieron causar los síntomas.

En este caso y dependiendo de la gravedad, el especialista podrá formularle medicamentos antipsicóticos o ansiolíticos para controlar las alucinaciones y disminuir la ansiedad.