Los líos diplomáticos entre Estados Unidos y Rusia, por los supuestos planes de invasión de parte del país euroasiático sobre Ucrania siguen aumentando la tensión política, no solo en la región, sino en todo el mundo.

Al ver lo que puede suceder y que poco a poco se empieza a hablar cada vez más de un conflicto bélico entre los países de occidente y Rusia, varias organizaciones internacionales ya han decidido manifestarse frente a esta situación. Una de estas es el G7, conocido también como el Grupo de los 7, conformado por siete de las grandes potencias del mundo, por lo que su importancia y su opinión sobre los problemas que atañen a todo el planeta es un punto relevante a tener en cuenta en relación con las tensiones en Ucrania.

Por esto, no es de sorprenderse que sea una noticia internacional la advertencia de bloqueos y sanciones económicas anunciadas por los ministros de Finanzas del G7 en contra de Rusia, en caso de que este país decida intervenir militarmente en Ucrania.

De acuerdo con este grupo internacional, las sanciones se impondrían “en un plazo muy corto”, lo que derivaría en “consecuencias importantes e inmediatas para la economía rusa”.

“Nuestra prioridad inmediata es apoyar los esfuerzos destinados a hacer avanzar la situación”, explicó el grupo de ministros que representan a Estados Unidos, Canadá, Alemania, Italia, Francia, Reino Unido y Japón.

Sin embargo, más allá de su mensaje de paz y neutralidad, el G7 aseguró que “cualquier agresión militar de Rusia contra Ucrania merecerá una respuesta rápida y eficaz”.

Cabe recordar que la situación geopolítica entre la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan), de la cual son parte Estados Unidos, y Rusia, no ha sido la mejor en la última semana, incluyendo algunos anuncios hechos por el presidente del país estadounidense, Joe Biden, quien el pasado 11 de febrero solicitó a sus compatriotas en Ucrania que abandonaran dicho territorio ante un posible riesgo de choque bélico con las fuerzas armadas rusas.

“Los ciudadanos estadounidenses deberían marcharse ahora (…). Estamos tratando con uno de los mayores ejércitos del mundo”, fue lo que dijo el primer mandatario estadounidense en conversación con NBC News.

No obstante, dio un parte de “tranquilidad” ante la inminente amenaza de guerra, al asegurar que, aún con una invasión rusa, no mandaría tropas estadounidenses a territorio ucraniano, incluso si se tratase de una operación para rescatar a sus ciudadanos que hayan quedado varados en ese país. De acuerdo con Biden, la idea es no caer en una provocación que podría acabar con el mundo al desatarse lo que podría considerarse como una Tercera Guerra Mundial.

“Sería una guerra mundial. Cuando estadounidenses y rusos comiencen a dispararse, estaremos en un mundo muy distinto”, añadió.

Es importante señalar que Estados Unidos no es el único país que ya pidió a sus ciudadanos que salgan de Ucrania con el fin de proteger sus vidas en caso de una posible guerra entre Rusia dentro de Ucrania. Otras naciones relevantes que ya tomaron esta decisión fueron Reino Unido, Corea del Sur, Países Bajos (Holanda), Alemania e Israel.

En el caso de Reino Unido, las autoridades de este Estado tomaron la decisión de tildar esta situación geopolítica como una “crisis” que podría derivar en un conflicto bélico, por lo que es de suma importancia que los ciudadanos británicos abandonen Ucrania en el menor tiempo posible y aprovechando que los vuelos comerciales aún se encuentran disponibles.

“La seguridad de nuestros nacionales es nuestra mayor prioridad, por eso hemos actualizado nuestra alerta de viaje”, indicó un portavoz del Ministerio de Exteriores de Reino Unido, citado por la agencia de noticias Europa Press.