El ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, advirtió este viernes 24 de mazo que el perfil de manifestante violento durante la huelga general contra la reforma de las pensiones, que deja hasta ahora 172 detenidos, es militante de la “ultraizquierda”.

“Pudimos documentar que la ultraizquierda está detrás de gran parte de las manifestaciones violentas, que no quiero confundir con las manifestaciones pacíficas”, señaló, tras denunciar el “cinismo” de los sectores de la extrema izquierda, que, según él, han hecho llamamientos a la violencia.

Del total de detenciones, 77 se han registrado en París por actos de saqueo, incendios o violencia contra las fuerzas de seguridad. Asimismo, hay al menos 50 incendios en curso en la capital y 140 han sido extinguidos durante la jornada.

Darmanin, quien se hizo presente en la jefatura de Policía para evaluar los daños durante las protestas, también informó que 149 agentes han resultado heridos en distintas ciudades francesas, de acuerdo con la información del diario Le Parisien.

Por su parte, la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, calificó de “inaceptables” tanto la “violencia” como la “degradación” durante las protestas, asegurando, no obstante, que manifestarse es un derecho.

“Todo mi agradecimiento a los cuerpos policiales y de salvamento movilizados”, dijo en su perfil oficial de Twitter.

Los enfrentamientos han sido especialmente intensos durante la noche en Burdeos, donde los manifestantes quemaron la entrada del Ayuntamiento y se han producido cargas policiales para dispersar a la multitud.

Las protestas también han sido violentas en Lyon, donde grupos de encapuchados lanzaron bombas molotov, además, con barras de hierro.

La misma escena de batalla campal se ha repetido en Grenoble y en Toulouse, ciudades en las que los manifestantes incendiaron mobiliario público y escribieron grafitis en las paredes en contra de la reforma de las pensiones.

Los manifestantes se paran cerca de los contenedores de basura en llamas durante una manifestación como parte del noveno día de huelgas y protestas nacionales contra la reforma de las pensiones del Gobierno francés, en Nantes. | Foto: Restringido

La Policía acusada de brutalidad en las protestas

Entretanto, las fuerzas de seguridad de Francia están en el punto de mira de los grupos de derechos humanos por la presunta brutalidad con la que manejan las protestas contra la reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron.

“El giro autoritario del Estado francés, la brutalización de las relaciones sociales a través de su Policía, la violencia de todo tipo y la impunidad son un escándalo mayúsculo”, advirtió Patrick Baudouin, de la Liga de Derechos Humanos.

Las críticas arreciaron este viernes. Más de 450 personas fueron detenidas en la jornada más violenta de protestas contra el plan de Macron de retrasar la edad de jubilación de 62 a 64 años.

Días antes, los grupos de derechos humanos, la oposición de izquierdas, abogados, magistrados y la Defensoría del Pueblo habían expresado su preocupación por lo que calificaron de detenciones “arbitrarias” y uso excesivo de la fuerza.

“Los actos esporádicos de violencia de algunos manifestantes y otros actos de otras personas durante una protesta no pueden justificar el uso excesivo de la fuerza”, advirtió el viernes el Consejo de Europa.

Manifestantes bloquearon varias vías de Francia y están creando desabastecimiento de combustible en varias estaciones de gasolina del país. | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

Pero los responsables de las fuerzas de seguridad defienden su actuación, afirmando que responden a alborotadores violentos y grupos anarquistas que suelen infiltrarse en las manifestantes para provocar enfrentamientos.

Sin embargo, se ha denunciado que la Policía ha detenido a escolares extranjeros y a transeúntes inocentes, ha disparado gases lacrimógenos contra manifestantes en lugares cerrados y ha provocado la amputación de un testículo a un hombre.

La táctica del “encapsulamiento”, consistente a acordonar a los manifestantes en una zona reducida, está también en la mira de los grupos de defensa de derechos humanos, que acusan a la Policía de socavar el derecho a protestar.

Las fuerzas de seguridad de Francia están en el punto de mira de los grupos de derechos humanos por la presunta brutalidad con la que manejan las protestas contra la reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron. (AP Photo/Laurent Cipriani) | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Policía “ejemplar”: Macron

El presidente de Francia, tras condenar este viernes la violencia de la noche anterior, dijo que las fuerzas de seguridad habían trabajado “de manera ejemplar”.

El ministro del Interior dijo que la Policía había respondido a “alborotadores, a menudo de extrema izquierda”, que habían herido a 441 agentes.

La AFP vio a posibles grupos de anarquistas y otros manifestantes prendiendo fuego a la basura, rompiendo escaparates y lanzando piedras y fuegos artificiales contra las fuerzas de seguridad.

Darmanin también dijo que se investigaba a once agentes por presunta brutalidad policial en la última semana.

“Es posible que, individualmente, los policías a menudo por cansancio cometan actos incompatibles con lo que se les enseñó”, agregó.

En uno de esos casos, una mujer había denunciado que un miembro de una unidad de motoristas le había golpeado con una porra contra una pared en París el lunes, dijo a la AFP una fuente conocedora del caso.

En otro, a principios de año, la Policía golpeó el 19 de enero a un ingeniero franco-español que perdió un testículo, declaró a esa agencia de noticias su abogada.

El jefe de la Policía de París, Laurent Nuñez, declaró a principios de semana que no se habían producido “detenciones injustificadas” y que las personas detenidas participaban en concentraciones “con vistas a cometer actos violentos”.

*Con información de Europa Press y la AFP.