Este 9 de noviembre, en medio del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), anunció su plan de garantizar el derecho a la “vida digna” para los 750 millones de personas que en el mundo deben sobrevivir a diario con menos de dos dólares al día, el proyecto lo denominó como Plan Mundial de Fraternidad y Bienestar.
En el anuncio, que se dio frente a los otros países miembros, también dio detalles de cómo sería la financiación del fondo para lograr repartir el dinero y ayudar a estas personas. En adición, se presentará oficialmente en medio de la próxima Asamblea General de la ONU.
Respecto a la adquisición del dinero, AMLO especificó que se obtendría de al menos tres fondos diferentes, entre ellos está el aporte voluntario del 4 por ciento anual correspondiente al monto total de las fortunas de las mil personas más ricas del mundo.
En segundo lugar, “una aportación similar por parte de las 1.000 corporaciones privadas más importantes por su valor en el mercado mundial”, explicó el presidente en medio del Consejo de Seguridad.
Y por último, López habría especificado que la tercera fuente de recursos vendría de una “cooperación” de aproximadamente el 0,2 por ciento del producto interno bruto de los países que hacen parte del G20, entre los que se encuentran todos los miembros de la Unión Europea, Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, entre otros.
El presidente de México espera poder recolectar aproximadamente un billón de dólares cada año, y dejó en claro la distribución del dinero para los beneficiarios se haría directamente, es decir, no se contrataría ningún tipo de intermediario para la repartición de los apoyos.
“Porque cuando se entregan fondos, supuestamente para ayudar a los pobres, a organizaciones no gubernamentales, de la sociedad civil u a otro tipo de organizaciones, no quiero generalizar, pero en muchos casos ese dinero se queda en aparatos burocráticos, en pagar oficinas de lujo, en mantener asesores, o se desvía y termina por no llegar a los beneficiarios”, explicó el mandatario de los mexicanos haciendo referencia a los gastos que se podrían sumar a este fondo si se contrata más personal.
Sin embargo, luego del vació en la explicación sobre la logística que tendría la distribución del dinero recolectado, AMLO anunció que si bien algunas organizaciones internacionales podrían intervenir para conformar las estructuras necesarias, estas serían el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
Respecto a la aceptación que esta propuesta tendría ante los otros países, AMLO dijo que esta podría ser aceptada sin mayor obstáculo, esto debido a que no se refería a un problema de seguridad internacional, ni afectaba directamente los conflictos políticos.
“No creo, lo digo con sinceridad, que alguno de los miembros permanentes de este Consejo de Seguridad se oponga a nuestra propuesta pues esta no se refiere a armas nucleares o invasiones militares, ni pone en riesgo la seguridad de ningún Estado; por el contrario, busca construir estabilidad y paz por medio de la solidaridad con quienes más necesitan de nuestro apoyo”, fueron las palabas que expresó el presidente.
Entre tanto, respecto a las personas que se beneficiarían de este fondo, se aclaró que serían para pensiones de adultos mayores, niños con condiciones limitadas, becas para estudiantes, apoyos a agricultores y a jóvenes que trabajen como aprendices, así como a la distribución de vacunas y medicamentos gratuitos.