El secretario general de la Organización de las Naciones, António Guterres, destacó este viernes que lograr la paz en el mundo es la otra gran emergencia en un momento en el que la humanidad encara el número más alto de conflictos violentos desde la formación de la entidad en 1945, año en que terminó la Segunda Guerra Mundial.
“Los golpes militares volvieron y la impunidad empieza a reinar. Las existencias de armas nucleares ahora superan 13.000, el nivel más alto en décadas. Los derechos humanos y el Estado de derecho se encuentran bajo ataque”, afirmó el funcionario.
“El populismo, el innatismo, la supremacía blanca y otras formas de racismo y extremismo están envenenando la cohesión social y las instituciones en todas partes. El retroceso de los derechos humanos, especialmente los derechos de las mujeres y las niñas, continúa”, agregó.
Adicionalmente, mencionó algunos de los países aquejados por conflictos que precisan alcanzar la paz para detener el sufrimiento extremo de su población.
- Afganistán, donde urge inyectar efectiva para evitar el colapso económico, garantizar el respeto de los derechos humano, especialmente de las mujeres y niñas, y desterrar el terrorismo.
- Colombia, que requiere profundizar la implementación del Acuerdo de Paz.
- Etiopía, que necesita un alto el fuego duradero, la retirada de tropas extranjeras y un diálogo inclusivo.
- En el caso de Haití, para el que solicitó apoyo en la redacción de una nueva constitución y elecciones seguras y pacíficas.
- Irán, donde pidió revivir el plan sobre su programa nuclear.
- Libia, cuyas elecciones general deben celebrarse lo antes posible, además de que urge la retirada de los combatientes extranjeros.
“Desde los Balcanes Occidentales hasta el Cáucaso... desde la República Centroafricana hasta Chipre y la República Democrática del Congo… desde Iraq hasta la península de Corea y Líbano, desde Mozambique hasta Somalia, desde Sudán del Sur hasta Venezuela y el Sahara Occidental, y más allá”, la solución de estos problemas requiere perseverar en los esfuerzos para prevenir conflictos, proteger a los civiles y consolidar la paz.
En esta línea de ideas, el secretario general arremetió contra las divisiones en el Consejo de Seguridad de la ONU, pugnando por la unidad y el compromiso de ese órgano resolutivo.
“Para evitar el caos en el mundo, es imperioso gestionar las divisiones geopolíticas. Necesitamos maximizar las áreas de cooperación al tiempo que establecemos mecanismos sólidos para evitar una escalada”, manifestó.
Finalmente, refrendó su disposición para garantizar que las mujeres estén en el centro del trabajo de la organización en materia de prevención de conflictos, construcción y consolidación de la paz. “Sabemos que los esfuerzos de paz son más exitosos y sostenibles cuando las mujeres son parte integral de la toma de decisiones y la mediación y los procesos de paz”, dijo.