Durante los últimos días, las autoridades climáticas de varios países han alertado sobre un aumento en las temperaturas casi de extremo a extremo. El panorama mantiene elevada la alerta por sus posibles consecuencias y la probabilidad de que las estimaciones continúen aumentando en los próximos días.
Tal es el caso de China, país que registró 52,2 grados centígrados el domingo 16 de julio en la región de Xinjiang (oeste), un máximo para mediados del mes en curso, según informó el servicio meteorológico.
Xinjiang, el territorio semidesértico limítrofe con varios países de Asia Central, es la zona más cálida de esa nación cuando se atraviesa el verano.
Una estación meteorológica en el pueblo de Turfán, Xinjiang, “registró un pico de temperatura de 52,2 °C el 16 de julio, rompiendo el récord histórico de calor para el mismo período del año”, dijo la Administración Meteorológica en un comunicado.
El récord anterior, según esta estación, estaba ubicado en julio del año 2017, cuando el mercurio había alcanzado 50,6 °C. La ciudad oasis de Turfán se localiza a las puertas del desierto de Taklamakan. La temperatura en el suelo localmente alcanzó el domingo los 80 °C, según los servicios meteorológicos del ‘gigante asiático’.
Las olas de calor en esta época no son ‘atípicas‘ en China; sin embargo, ese territorio se enfrenta en los últimos meses a condiciones meteorológicas máximas, acentuadas por el cambio climático, según han explicado los científicos.
Temperaturas extremas en otras zonas
Asia no es la única región que está sintiendo los efectos del cambio climático, pues en Europa las temperaturas récord en varias zonas son, por el momento, una constante por la cual se han hecho llamados de prevención. En España e Italia se espera que los ciudadanos se vean golpeados por una ola de calor superior a los 40 °C.
Sobre los españoles, la agencia meteorológica emitió una alerta naranja para esta jornada, con “temperaturas inusualmente altas”, de entre 38 y 42 °C en buena parte de la nación; esto representa un incremento de hasta 10 grados por encima de las estimaciones habituales, mientras que en Cerdeña (isla italiana) se prevén hasta 48 °C y en Roma, 40 °C con tendencia a aumentar.
Estas condiciones climáticas también se han hecho sentir con desastres naturales; por ejemplo, un incendio en la isla de La Palma, en el archipiélago de las Canarias, arrasó con 5.000 hectáreas este fin de semana y no dejó más alternativa que evacuar a unas 4.000 personas.
En Francia se esperan mediciones cercanas a los los 40 °C durante este martes en el sureste del país, según Météo-France. “Me cuesta mucho el calor. Compré un miniventilador, un paraguas y botellas de agua”, dijo Lilu Da Costa Rosa, una brasileña de 48 años que visitó Roma en la jornada anterior.
A pesar del calor ‘insoportable‘, alrededor de 15.000 fieles y turistas se congregaron en la Plaza de San Pedro para escuchar la oración del Ángelus del Papa Francisco, de acuerdo con información de la Santa Sede. “Tenemos dificultades para dormir. Y nosotros, que estamos vestidos de negro, estamos sudando como el infierno”, dijo François Mbemba, un sacerdote congoleño.
Panorama en Norteamérica no es diferente
En cuanto a Estados Unidos, los servicios meteorológicos observan el fenómeno natural, que es calificado como “opresivo” en el sur del país, y pronostican cálculos récord. Y es que el fin de semana, con mayor fuerza, fue perceptible la ‘inclemencia’ del planeta. En el Valle de la Muerte (California) el termómetro alcanzó 51 °C este sábado.
Respecto al estado de Florida, la ciudad de Miami emitió su primera alerta de “calor excesivo” en su historia, advirtiendo del “calor abrumador” en los próximos días.
Mientras tanto, Canadá no se queda atrás donde más de diez millones de hectáreas se han consumido en lo corrido de 2023, a la vez que datos provisionales sitúan en 906 los incendios activos hasta el sábado 15 de julio, 570 de ellos ‘fuera de control’.
*Con información de AFP.