La población mundial alcanzaría las 8.000 millones de personas el próximo 15 de noviembre, según la proyección de un informe de Naciones Unidas este lunes, en el que además India superaría a China como el país más poblado del mundo en 2023.

Ese hito poblacional “es un recordatorio de nuestra responsabilidad compartida de cuidar nuestro planeta y un momento para reflexionar sobre dónde estamos en deuda con nuestros compromisos mutuos”, dijo el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

“Esta es una ocasión para celebrar nuestra diversidad, reconocer nuestra humanidad común, y maravillarnos por los avances en salud que han extendido la esperanza de vida y reducido dramáticamente las tasas de mortalidad maternal e infantil”, añadió.

La proyección del Departamento de Economía y Asuntos Sociales de la ONU dice que la población mundial está creciendo en su ritmo más lento desde 1950.

El mundo alcanzaría los 8.500 millones de habitantes en 2030 y los 9.700 millones en 2050, llegando a un pico de alrededor de 10.400 millones en la década de 2080 para finalmente estabilizarse hasta 2100.

Mientras se observa una caída neta en la natalidad en países en vía de desarrollo, más de la mitad del crecimiento proyectado en la población mundial en las próximas décadas se concentrará en ocho países, señala el informe.

Precisa que esas naciones son la República Democrática del Congo, Egipto, Etiopía, India, Nigeria, Pakistán, Filipinas y Tanzania.

ONU pide acciones más ambiciosas para proteger a los océanos

La comunidad internacional debe impulsar políticas más ambiciosas para proteger a los océanos, sostiene la declaración final de una conferencia de Naciones Unidas en Lisboa, preparatoria de las negociaciones que en agosto buscarán elaborar un tratado internacional de protección del mar.

“Se necesita una mayor ambición a todos los niveles para hacer frente al grave estado de los océanos”, indica la declaración final de la Conferencia de la ONU sobre los océanos celebrada la semana pasada en la capital portuguesa.

La reunión, que contó con la participación de funcionarios, expertos y representantes de la sociedad civil de 140 países, no tiene carácter ejecutivo, pero permitió acercar posiciones sobre la protección de las aguas internacionales más allá de la jurisdicción nacional.

“La pérdida de biodiversidad, el declive de la salud de los océanos, la forma en que se desarrolla la crisis climática... todo tiene una razón común, que es... el comportamiento humano, nuestra adicción al petróleo y al gas, y todo ello tiene que ser abordado”, declaró a la AFP Peter Thomson, enviado especial de la ONU para los océanos.

Los océanos producen la mitad del oxígeno que respiramos, regulan el clima y proporcionan la mayor fuente de proteínas de la humanidad. También absorben un cuarto de la contaminación por CO2 y el 90 % del exceso de calor del calentamiento global.

Sin embargo, la actividad humana los está llevando al límite. El agua del mar se ha vuelto ácido y amenaza las cadenas alimenticias y la capacidad del océano para absorber carbono.

Además, el calentamiento global provoca olas de calor marinas que afectan a los arrecifes de coral y aumentan las zonas sin oxígeno.

Serie de acuerdos

Actualmente, una serie de acuerdos y organismos regula la navegación, la pesca y la extracción de minerales del fondo marino.

Aún así, Thomson se muestra “muy confiado” en que los gobiernos puedan acordar en agosto un nuevo tratado de alta mar “sólido pero operativo”.

“Ha aumentado mucho la presión sobre los países menos interesados para crear un mecanismo eficaz de protección de alta mar”, dijo por su parte Tiago Pitta e Cunha, director de la fundación portuguesa Océano Azul.

“Sabemos que si las palabras pudieran salvar los océanos, no estarían al borde del colapso”, dijo a la AFP Laura Meller, de la oenegé Greenpeace.

“Por eso, en agosto, cuando los gobiernos se reúnan en las Naciones Unidas, es necesario que ultimen un sólido tratado mundial sobre los océanos”, añadió.

Los esfuerzos para proteger los océanos continuarán en dos cumbres clave a finales de este año: las conversaciones de la ONU sobre el clima en noviembre y las negociaciones de Naciones Unidas sobre la biodiversidad en diciembre.

*Con información de AFP.