Al menos 36 personas murieron y miles han sido evacuadas por los incendios forestales que arrasan dos islas de Hawái y que dejaron casi destruida una localidad, obligando a sus habitantes a lanzarse al mar para huir de las llamas.
“Se han encontrado hasta ahora 36 personas muertas debido al fuego de Lahaina, que sigue activo”, dijo el gobierno del condado de Maui en un comunicado emitido en la noche de ayer miércoles 9 de agosto.
Los incendios han quemado más de 800 hectáreas de terreno; según las autoridades, las llamas crecieron en la madrugada del martes y el rápido avance puso en peligro a viviendas, empresas y servicios públicos, así como a más de 35.000 personas en la isla de Maui, informó en un comunicado la Agencia de Gestión de Emergencias de Hawái.
El fuego arrasó la localidad de Lahaina, en la costa oeste de Maui. “Gran parte de Lahaina en Maui quedó destruida y cientos de familias locales fueron desplazadas”, indicó el gobernador Josh Green.
Imágenes difundidas en las redes sociales muestran las brasas destruyendo esta localidad turística, densas columnas de humo tiñendo el cielo de negro y varios barcos atracados en Lahaina también en llamas.
Habitantes de la zona saltaron al agua “para evitar el fuego”, dijo el mayor general del Ejército estadounidense, Kenneth Hara, a Hawái News Now. Al menos 14 personas fueron rescatadas del mar por la Guardia Costera.
Los incendios afectaron con fuerza a Maui, pero también hay fuegos activos en la isla de Hawái.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha firmado la declaración formal de desastre en el estado de Hawái para colaborar en la emergencia derivada de la ola de incendios forestales que comenzó el martes y que se ha cobrado ya al menos 36 vidas, si bien las autoridades locales asumen que el balance de víctimas puede aumentar en las próximas horas.
La Casa Blanca ha explicado que, entre las primeras medidas, se ofrecerán refugios temporales y ayudas a la reconstrucción, así como programas de asistencia que permitan también a las empresas “recuperarse de los efectos del desastre”. El Gobierno estatal y también las administraciones locales pueden pedir ahora más fondos.
Biden, además, ha hablado por teléfono con el gobernador hawaiano, Josh Green, para hacerle partícipe de la ayuda y expresarle personalmente sus condolencias por la tragedia.
La vicepresidenta Kamala Harris, que ha confirmado la movilización a nivel federal para ayudar a las autoridades y habitantes de Hawái, ha aplaudido la labor “heroica” de los servicios de emergencia, al tiempo que ha instado a los vecinos de las zonas afectadas a seguir en todo momento las recomendaciones oficiales “durante este momento difícil”.
Los militares estadounidenses desplegaron tres helicópteros para ayudar a combatir los incendios, informó el Comando Indo-Pacífico en un comunicado.
Los helicópteros militares que ayudan a los bomberos utilizaron el miércoles 570.000 litros de agua para controlar los incendios en el condado de Maui. “El objetivo principal es salvar vidas, evitar el sufrimiento de las personas y frenar las cuantiosas pérdidas materiales”, declaró Hara.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó “que todos los recursos federales disponibles en las islas ayuden en la respuesta” contra los incendios.
La red hospitalaria de la isla está “saturada” por los pacientes con quemaduras y personas que inhalaron humo, dijo la vicegobernadora de Hawái, Sylvia Luke, que describió la situación como “dramática”. Luke informó que los incendios fueron causados por las condiciones secas y los fuertes vientos del huracán Dora, que se encuentra al sur del archipiélago estadounidense, pero que no se espera que toque tierra.
Las autoridades del condado pidieron a todos los visitantes que abandonen la isla “lo antes posible” y organizaron buses para llevar a los turistas al aeropuerto de Kahului, según un comunicado publicado en Facebook.
En el aeropuerto, muchos turistas quedaron varados, ya que sus vuelos fueron cancelados o retrasados, y periodistas de AFP vieron a muchas personas durmiendo en el suelo. Millones de personas han sufrido fenómenos meteorológicos extremos en todo el mundo en las últimas semanas, que según los científicos, han sido exacerbados por el cambio climático.
Con información de AFP y Europa Press*