Donald Trump, expresidente y nuevo candidato para las próximas elecciones de Estados Unidos, ha generado otra controversia. Esta vez todo gira alrededor del príncipe Harry, que ahora vive en Estados Unidos. Pues parece ser que en caso de demostrarse que el duque de Sussex mintió sobre su historial de consumo de drogas al solicitar su visa, Trump optaría por deportarlo.
Este martes, durante una entrevista en GB News con Nigel Farage, Trump reveló que “podría tomar las medidas apropiadas” para deportar a Harry si gana las elecciones presidenciales en noviembre.
“Tendremos que ver si saben algo sobre las drogas, y si mintió, tendrán que tomar las medidas adecuadas”, comunicó durante la entrevista. “¿Acción apropiada? ¿Lo que podría significar no quedarse en Estados Unidos?”, preguntó el periodista.
“Oh, no lo sé, tendrás que decírmelo, sólo tienes que decírmelo, uno habría pensado que lo habrían sabido hace mucho tiempo”, respondió el expresidente.
Según afirma La Vanguardia, esta no es la primera vez que Trump se opone a Harry, después de acusarlo de “traición” a la difunta reina Isabel II: “Yo no lo protegería, traicionó a la reina, eso es imperdonable. Estaría solo si fuera por mí”, advirtió en declaraciones previas al referirse al príncipe Harry.
Harry ha vivido en California durante cuatro años junto a su esposa, Meghan Markle, y sus dos hijos, el príncipe Archie y la princesa Lilibet, pero aún no ha obtenido la ciudadanía estadounidense. El proceso de solicitud de visa para residencia en Estados Unidos requiere la revelación de antecedentes, incluido el historial de consumo de drogas, algo que el príncipe admite haber hecho, todo lo relacionado lo plasmo en su autobiografía En la sombra.
El pasado mes, el grupo conservador de expertos The Heritage Foundation tomó medidas legales contra el Departamento de Seguridad Nacional, solicitando la revisión y reevaluación de los documentos relacionados con la visa de Harry bajo la ley de libertad de información, argumentando que podría haber recibido un trato preferencial en su solicitud de residencia. Pues, por su parte, Harry, en su libro, admitió haber consumido una variedad de sustancias ilícitas, incluyendo marihuana, cocaína y hongos psicodélicos, acciones que lo colocarían en la lista negra de Trump a la hora de tomar la decisión de deportarlo de los Estados Unidos.
Sin embargo, en su libro, el príncipe Harry expresó su punto de vista respecto a lo sucedido con las sustancias: “No fue una experiencia placentera y no me llenó de felicidad, ya que parecía afectar a todos los que me rodeaban, pero sí me proporcionó una sensación de alteración, y ese era el objetivo principal”, se puede leer en el libro.
De acuerdo con La Vanguardia, Nile Gardiner, portavoz de la organización, hizo hincapié en la necesidad de garantizar la igualdad en los asuntos migratorios. “El Departamento de Seguridad Nacional debe asegurarse de no hacer la vista gorda, ya sea si el príncipe respondió honestamente o si el príncipe mintió en su solicitud de visa”, afirmó Gardiner. “Ambas acciones serían inapropiadas”.
Además de dichas aclaraciones, para la toma de esta decisión ya existen precedentes como el caso de la chef británica Nigella Lawson en 2014, a quien se le impidió abordar un vuelo hacia Estados Unidos después de admitir haber consumido cocaína durante un caso judicial no relacionado.