Menos de una semana lleva el rey Carlos III en el trono del Reino Unido y muchos siguen hablando de sus capacidades para llevar las riendas en sucesión de su madre, la reina Isabel II, quien falleció el pasado jueves en su residencia escocesa de Balmoral, rodeada de su círculo más cercano, a los 96 años.
Ya sea por el bajo nivel de popularidad; por su pasado con la princesa Diana; su amor actual con Camila Parker, a quienes muchos medios se refirieron como reina consorte pese a que oficialmente es su majestad, y hasta por su condición mental, múltiples han sido las críticas para el nuevo líder de este reino, quien se juramentó en el cargo desde el pasado
Frente a este último punto, por medio de las redes sociales, se aprovechó el popular suceso del tintero, ocurrido durante su posesión, cuando el rey Carlos III se molestó por un tintero que entorpecía su firma del documento real y dio su orden, con fastidio, a un ayudante para que realizara una tarea que él mismo podría haber hecho; revivió el debate sobre el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) que al parecer padece.
Este tema queda al descubierto en el documental Serving the Royals: Inside the Firm, en el cual se deja claro que gracias a que fue criado desde la cuna con un ejército de ayudantes a su alrededor, el rey Carlos III tiene algunas obsesiones en sus rutinas y no está acostumbrado a las tareas mínimas.
Así mismo, cita al exmayordomo de la Princesa Diana, Paul Burrell, quien hizo revelaciones sobre las conductas de Carlos: “Su pijama se plancha todas las mañanas, al igual que los cordones de sus zapatos. El tapón de la bañera tiene que estar en una posición determinada y la temperatura del agua tiene que ser simplemente tibia”.
Además de esto, según el documental, el ahora rey del Reino Unido tiene una serie de especificaciones para su rutina diaria, que van desde el momento del baño, hasta la hora de cenar. En cada uno de estos momentos existen una serie de protocolos que se deben cumplir para no alterar al monarca.
Según este relato, Carlos no manipula la pasta dentífrica a la hora de lavar sus dientes y deben ser sus ayudantes de cámara quienes dejen 2,5 centímetros de pasta dental sobre el cepillo todas las mañanas, minutos antes de que Carlos se higienice. Estas exigencias son casi un ritual al interior de la familia real.
En el documental Serving the Royals: Inside the Firm, también habla Darren McGrady, quien fue Chef de Carlos III cuando fue príncipe de Gales, y compartió cómo es el desayuno del nuevo rey.
“La instrucción era colocar dos ciruelas y un poco de jugo en el tazón y enviárselo para el desayuno. Le mandaba dos ciruelas y él dejaba una para que volviera a mis manos y yo la regresara al frasco. Una mañana pensé en ponerle solo una. La envié al comedor, me mandó a llamar y me preguntó: ‘¿Tienes dos, por favor?’. Así que tuve que seguir enviándole dos cada mañana y me devolvía una”, explicó McGrady.
Por otra parte, el diario La Nación de Argentina cita un adelanto de la nueva publicación de Tina Brown, que habla sobre las exigencias de la familia real, en la cual se conocen muchas de estas obsesiones relatadas con base en los particulares pedidos de Carlos cuando realiza viajes al exterior.
En el libro, que saldrá a fin de mes, la autora cuenta que el príncipe de Gales envía su cama, muebles e incluso fotos de adornos un día antes de salir hacia su destino. Cuando este año viajó a Canadá por una de las actividades oficiales del Jubileo de Platino, tuvieron que trasladar la cama ortopédica que utiliza, el asiento del inodoro y el papel higiénico Kleenex Velvet.