Los sismos han estado presente en la historia de la humanidad e infortunadamente cuando llegan, muchos de ellos, solo dejan tragedias. Este jueves, 17 de agosto, por ejemplo, un temblor de 6.1 sacudió Bogotá y varios departamentos del centro de Colombia, causando daños materiales. Así como el caso de Colombia, la lista de países que han sufrido por los terremotos es larga.
Aunque en la memoria de muchas personas está el reciente terremoto de magnitud 7.8 que estremeció Turquía y Siria, la madrugada del lunes 6 de febrero de 2023, ha habido otros que sorprendieron por su enorme y devastador impacto. Ese es el caso del fatídico terremoto de Valdivia en Chile, el 22 de mayo de 1960, considerado el mayor sismo de la historia de la humanidad.
El temblor ocurrió en Valdivia, zona sur de Chile y tuvo una intensidad de 9.5. Peor aún, la tierra se movió por al menos 10 minutos. El movimiento desencadenó un tsunami con olas de hasta 25 metros de altura. Dos placas continentales se empujaron más de 30 metros entre sí, liberando una enorme cantidad de energía. Esto redujo a escombros ciudades enteras en poco más de diez minutos y redibujó la geografía de toda una región.
Alrededor de 6.000 personas perdieron la vida en la región del sismo. Quince horas más tarde, las olas del tsunami que se desencadenó por el sismo cruzaron el Pacífico y llegaron hasta pueblos costeros de Japón, donde mataron a más de 130 personas, pasando por Hawai, California y Nueva Zelanda, donde se cobraron otras víctimas.
Y como si no fuera suficiente, 33 horas después se produjo la erupción del complejo volcánico Cordón Caulle.
Ese episodio cambió la historia de Chile, un país altamente propenso a los temblores. Algunas poblaciones desaparecieron y hasta un volcán entro en erupción.
Otras cifras del sismo también son elocuentes. La longitud de la ruptura fue de entre 900 y 1.000 km, abarcando gran parte del sur del país. Tan extensa que algunos expertos optaron por llamarlo como “el gran terremoto de Chile de 1960″.
Desde antes de esa tragedia, Chile ya había comenzado a avanzar en normas de construcción antisísmica, pero el megaterremoto le dio un impulso definitivo. Hoy, es uno de los líderes en esta materia, con el desarrollo de mecanismos de disipación y amortiguación sísmica.
“Cada uno de los terremotos en Chile ha marcado un hito pero el del 60 ha sido el más grande respecto a la modernización y actualización de las normas sísmicas de construcción”, dice a la AFP Sergio Barrientos, director del Centro Sismológico Nacional.
Cuatro años después y en Viernes Santo, el estado de Alaska se vio golpeado por el segundo terremoto más fuerte en la historia de la humanidad. El gran terremoto de Alaska, con una magnitud de 9,2, destruyó el 27 de marzo de 1964 gran parte de la infraestructura en el sur y centro del estado. Dentro de la terrible desgracia, la zona afectada tuvo un golpe de suerte: los edificios estudiantiles estaban vacíos, porque era festivo. En la ciudad más grande de ese estado, Anchorage, se hundieron calles enteras, y las ciudades costeras fueron arrasadas por una enorme ola de tsunami. Muchas de las 139 víctimas, fallecieron por ahogamiento.
La tragedia de Turquía y Siria
Más de 48.000 personas murieron en Turquía y casi 6.000 fallecieron en Siria tras los dos terremotos del 6 de febrero, el primero de una magnitud de 7.8 y el segundo de 7.5.
Para sorpresa de los rescatistas, en los días recientes se encontraron varias personas con vida, lo que ha sido catalogado como un milagro bajo las condiciones climáticas que azotan la zona y las difíciles condiciones en terreno que dificultan la extracción de los escombros; sin embargo, Turquía concluyó las operaciones de rescate tras el terremoto, manteniendo solamente dispositivos de ayuda en las dos provincias más golpeadas.