Este domingo, los peruanos acudirán a las urnas en medio de la pandemia de la covid-19 para escoger a su próximo presidente, o por lo menos, apoyar a su favorito para que pueda pasar a la segunda vuelta. Los punteros están muy cerca y lo único seguro hasta este momento es que los peruanos aún no se deciden por qué opción elegir.
A pesar de la incertidumbre, los candidatos son variopintos y con propuestas muy distintas. Las encuestas muestran un panorama reñido y todo se definirá en un primer momento este domingo en las urnas. Según la encuesta telefónica del Instituto de Estudios Peruanos (IEP) del diario peruano de La República, ningún candidato supera el 10 % de intención de voto. Perú escogerá este domingo en primera ronda al sucesor del presidente Francisco Sagasti, entre una baraja de diferentes postulados.
Aún así hay 6 favoritos que competirán para pasar a la segunda vuelta y para los analistas cualquiera podría sorprender llegando a la segunda vuelta en representación de un sector pueblo peruano. Señalan que este panorama se debe a una falta de representación en la que los ciudadanos de ese país poco creen en los partidos que generalmente los había identificado.
Más allá de lo reñido que está el panorama electoral del Perú, hay tres punteros que lideran la intención de voto. Yonhy Lescano con el 10 %, Verónika Mendoza 9 % y Hernando de Soto con el mismo número, según encuestas de hace menos de una semana.
Lescano tiene 62 años, es un experimentado legislador que ha demostrado tener un pensamiento económico liberal mientras que en políticas sociales es más conservador. Entre sus propuestas ha hablado de distribución de la riqueza y pedir a los bancos privados bajar las tasas de interés.
Mendoza por su parte es la representación de la izquierda en ese país. Tiene 40 años y ha logrado ir subiendo en las encuestas hasta posicionarse como una de las favoritas. En 2016 también participó de los comicios y quedó en el tercer lugar. Entre sus propuestas ha dicho que, de ganar, revisará las exenciones fiscales de las empresas más grandes del país y creará un impuesto para los más ricos.
Para algunos analistas, el populismo puede generar apoyos por la desconfianza que ha generado en la gente la falta de representatividad y los hechos de corrupción que se han evidenciado recientemente en el país como el ‘vacunagate’ entre otros. La crisis de la pandemia ha agudizado ese malestar y eso le daría opciones a un candidato con propuestas que pretenden un cambio de fondo.
Por su parte, Hernando de Soto es un economista de 79 años que ha hablado de “delincuentes extranjeros”, por lo que ha propuesto mayores medidas en políticas migratorias para el país. Ha pedido el apoyo del sector privado para el plan de vacunación de Perú, pero se generó toda una polémica cuando salió a la luz que viajó a Estados Unidos a inmunizarse.
Otro de los candidatos que tienen posibilidades de pasar a la segunda vuelta, luego de las elecciones de hoy, es la heredera Keiko Fujimori, hija del expresidente condenado Alberto Fujimori y quien también ha competido en varias ocasiones por llegar al poder. Su propuesta ha sido la generación de empleo y la apuesta porque el sector privado pueda reactivarse. Fujimori también enfrenta cuestionamientos por Odebrecht.
También está en la carrera George Forsyth, un exfutbolista que en determinado momento llegó a puntear en las encuestas pero que ha ido bajando en las últimas semanas. Precisamente es el reflejo de la insatisfacción de los peruanos con la política tradicional, por eso ha basado su discurso en cambiar la forma en la que se hace política en Perú. Fue alcalde del distrito de Lima y su apariencia suele ser de alguien relajado y fresco. Se ha enfocado en proponer alivios por la pandemia y ayudar a los mayores con las pensiones.
Otro competidor en la baraja es el representante de los sectores más conservadores, Rafael López. El multimillonario es miembro del Opus Dei y tiene negocios en el sector hotelero y ferroviario, ha sido comparado con políticos de ese corte como Jair Bolsonaro o Donald Trump. Ha criticado a las parejas del mismo sexo y se opone a temas polémicos como el aborto.
Con ese panorama, Perú desarrollará sus elecciones este domingo en medio de cuestionamientos, la crisis de la covid-19 y un sinsabor por parte del electorado con la clase política del país. Para algunos analistas esto se podría ver reflejado en el porcentaje de abstencionismo que se pueda presentar, que refleje la indignación por los hechos de corrupción que se han conocido o que son investigados.
Lo único cierto por ahora es que hay candidatos para todos los gustos con posibilidades reales de pasar, pero hasta el momento nada está definido.