El primer ministro de Taiwán afirmó este martes que Elon Musk “no sabe demasiado” sobre la isla, después de que el multimillonario sugiriera que esta debería ser parte de China. El hombre más rico del mundo provocó un gran enfado en Taiwán por la entrevista que ofreció al Financial Times, en la que trató sobre la tensa relación que Taiwán mantiene con China.
Taiwán vive bajo la amenaza de invasión de Pekín, que defiende que la isla forme parte de su territorio. En la entrevista, publicada el pasado viernes 7 de octubre, Musk afirmó que Taiwán debería alcanzar un acuerdo “razonablemente aceptable” con Pekín para convertirse en una “zona administrativa especial” de China.
Se trata del modelo que China usa con Macao y Hong Kong. Desde hace tiempo, los líderes chinos han sugerido implantar el mismo modelo para Taiwán, aunque esta idea es inaceptable para la gran mayoría de los taiwaneses, según las encuestas. El primer ministro de la isla, Su Tseng-chang, reaccionó a los comentarios de Musk.
“Musk es un empresario”, dijo durante una sesión en el Parlamento. “Tiene una gran fábrica de autos en Shanghái y quiere promover sus vehículos eléctricos [...]. Un empresario, un día dice una cosa y otro día dice otra”. “Musk solo habla para sí mismo pero, en realidad, no sabe demasiado sobre Taiwán y tampoco entiende las relaciones” entre Taipéi y Pekín, agregó.
Los comentarios de Musk sobre Taiwán fueron aplaudidos por varios funcionarios chinos, incluyendo al embajador de China en Washington, Qin Gang. La semana pasada, Musk estuvo en el centro de una querella mediática con responsables ucranianos, incluyendo al presidente Volodímir Zelenski, por unas ideas que manifestó sobre cómo poner fin a la invasión rusa.
El magnate propuso un acuerdo de paz que consista en volver a organizar referendos de anexión a Rusia en las regiones ucranianas controladas por Moscú, bajo la supervisión de Naciones Unidas, el reconocimiento de la soberanía de Rusia en la península de Crimea, anexionada por Moscú en 2014, y en que Ucrania se convierta en un país neutral.
Esto ocurre luego de que la presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen advirtiera a China que la isla nunca va a renunciar a su modo de vida democrático ni a sus libertades, en un discurso por la fiesta del Día Nacional. La gobernante comparó la invasión rusa de Ucrania con las amenazas de Pekín de un día tomar el control de Taiwán, por la fuerza si fuera necesario.
“No podemos ignorar en absoluto el desafío que esas expansiones militares suponen para el orden mundial libre y democrático. Esos acontecimientos están inextricablemente relacionados con Taiwán”, sostuvo. Los 23 millones de habitantes de la isla viven bajo la constante amenaza de una invasión china, y la guerra rusa en Ucrania avivó los temores de que Pekín pueda intentar algo similar con Taiwán.
Tsai insistió en que Taiwán no desea convertirse en parte de China. “El consenso más amplio entre el pueblo taiwanés y nuestros varios partidos políticos es que debemos defender nuestra soberanía nacional y nuestro modo de vida libre y democrático”, insistió. “En este punto, no hay margen para ceder”, afirmó.
*Con información de AFP.