El Consejo de Seguridad tiene la obligación de encontrar la forma de “proveer protección” a los civiles palestinos, pidió el martes el embajador de esa población ante Naciones Unidas después de que colonos israelíes atacaron una ciudad en la Cisjordania ocupada.

“Creemos que el Consejo de Seguridad tiene una responsabilidad sobre sus hombres, especialmente con relación a (...) dar pasos para proveer protección a la población civil, especialmente tras el acto criminal y terrorista por parte de colonos” en Huwara y otras villas cercanas, dijo el enviado Riyad Mansour a los periodistas tras una reunión del consejo a puerta cerrada.

La reunión de emergencia fue solicitada por Emiratos Árabes Unidos luego de que cientos de israelíes atacaron la ciudad de Huwara en el noreste de Cisjordania, el domingo, cuando tiraron piedras a casas de palestinos y prendieron fuego a edificios y automóviles.

El embajador palestino en las Naciones Unidas, Riyad Mansour, acusó a Israel de agredir al pueblo palestino y a Estados Unidos de "pisotear" el derecho internacional. Mientras Mansour se preparaba para hablar, la embajadora estadounidense, Nikki Haley, abandonó la sala. Mansour hizo lo mismo cuando el embajador israelí, Danny Danon, tomaba la palabra. Atilgan Özdil/ Anadolu

Mansour dijo que sería de ayuda que representantes del Consejo de Seguridad visitaran Huwara para que “vean con sus propios ojos (y) sientan el horror en las mentes y corazones de niños y madres y de sus familias”.

El Consejo de Seguridad de 15 países miembros “debería tratar de ver si hay maneras para que podamos frenar cualquier incitación a una escalada de violencia, y promover el diálogo” entre israelíes y palestinos, dijo la embajadora de Malta, Vanessa Frazier, quien presidió el consejo en febrero. Mientras tanto, ambas partes “necesitan (...) abstenerse de cualquier acto violento”, subrayó.

Riyad Mansour, embajador palestino ante Naciones Unidas. | Foto: Foto: Reuters.

La semana pasada, por primera vez en seis años, el Consejo de Seguridad denunció la construcción de asentamientos israelíes en territorios palestinos, en un comunicado que también aprobó Estados Unidos. “Continuaremos tocando a la puerta del Consejo de Seguridad, no solo para hablar con una sola voz, sino para tomar más medidas”, dijo Mansour.

Mientras el conflicto palestino-israelí escala, funcionarios de ambas partes prometieron el domingo, durante una reunión en Jordania, prevenir nuevos disturbios.

Gobierno de Benjamín Netanyahu demolerá casa de la familia de un palestino que mató a varios israelíes

Israel demolerá la casa de un palestino que mató a varios israelíes, pese a que fue construida con el dinero que la familia recibió hace años en compensación de la muerte del abuelo del atacante, a manos de un extremista judío. En Jerusalén Este, las puertas de la casa de Moussa y Fatima Alqam y su cuatro hijos fueron selladas luego de que su hijo Khayri Alqam, de 21 años, matara a siete personas frente a una sinagoga en el asentamiento de Leve Yacopí.

Khayri Alqam fue abatido el 27 de enero y su familia recibió la orden de demolición de la casa, según una política de larga data que consiste en castigar a las familias de los palestinos que matan a israelíes. “Esperamos que la casa no sea destruida. Designamos un abogado y estamos esperando” la apelación, comentó uno de los familiares del atacante, que pidió anonimato por temor a represalias.

Exprimer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, durante las elecciones 2022. | Foto: Reuters / Autor: Ronen Zvulun

Khayri Alqam llevaba el nombre de su abuelo muerto en 1998, presuntamente a manos de un extremista israelí. En esa ocasión, la familia Alqam dice que recibió la visita del entonces presidente israelí, Ezer Weizman, y fue indemnizada por el asesinato. Con ese dinero construyeron la casa en el barrio al-Tur de la anexionada Jerusalén Este, y la familia ocupó el segundo piso del pequeño edificio de apartamentos, cuyos otros pisos fueron ocupados por familiares.

En 2010, un israelí fue detenido por el asesinato de Khayri Alqam y de otros palestinos, aunque posteriormente fue liberado y nadie fue condenado por esos crímenes. “¿A quién le reclamamos?”, preguntó el familiar. “Él debe ser castigado. Nos perjudicaron en 1998 y nos perjudican hoy”, afirmó.

El israelí acusado por ese caso tuvo apoyo de Itamar Ben-Gvir, un agitador de extrema derecha que actualmente es ministro encargado de la seguridad nacional de Israel.

*Con información de AFP.